En una reciente reunión mantenida por los miembros de la Junta Directiva de la Asociación Chiclanera de Hostelería, y tras analizar el plan de desescalada presentado por el Gobierno para salir del confinamiento, desde dicho colectivo local ven "muy difícil la viabilidad económica de la apertura de nuestros negocios en tales circunstancias, ya que supondría abrir nuestros locales totalmente a ciegas, sin protocolos, sin flexibilidad en los ERTE, con movilidad restringida a un kilómetro, con clientela asustada y con un aforo que no cubre ni el coste de los mínimos que soporta un negocio en la actualidad".

De esta forma, desde la citada asociación se argumenta que "la reapertura supondría recuperar el 100% de los gastos de autónomos, seguros sociales, sueldos, luz, alquiler, etc… además de los propios que cada establecimiento tenga que asumir para garantizar la seguridad a sus empleados y clientes, a los cuales desde nuestro punto de vista no se podrá hacer frente con la actividad mínima que nos presenta el Gobierno, a pesar del esfuerzo que por parte del Ayuntamiento se ha hecho en este periodo de confinamiento condonando impuestos y tasas".

"A la difícil situación a la que se enfrentan aquellos que solo pueden abrir con el 30% de la capacidad de sus terrazas -continúan explicando-, habría que añadir a los establecimientos de barrio y pequeños locales que viven del tapeo, los cuales en la mayoría de los casos no cuentan con terrazas, o a los que al estar situados en la zona de la playa se verían limitados por la poca afluencia de público, al no estar dentro del radio de movilidad de un kilómetro".

Por último, los hosteleros quieren trasladar un mensaje de esperanza y optimismo a la población en general manifestando que "debemos recordar que ya nuestros abuelos consiguieron salir de la posguerra y la mayoría de nosotros después de la crisis del 2008, así que es el momento de luchar todos juntos para salir adelante".