La caída del PGOU, un verano de récord y los envites de la pandemia marcan el 2021 para una Chiclana que ya mira al nuevo año
Balance del año y previsiones para 2022
La situación urbanística local tras la reciente entrada en vigor de las Normas Subsidiarias del 87 ponen el punto y final a un año marcado por los vaivenes de la crisis sanitaria y con un verano histórico en cuanto al turismo
Proyectos como el de la Alameda del Río y el yacimiento fenicio de El Castillo o la puesta en marcha definitiva del tranvía se presentan como algunos de los atractivos del año que comienza
La pandemia de Covid-19 vuelve a ser la gran protagonista al cierre del 2021, como ya lo fue en 2020, a pesar de que muchos ya la habían dado por finalizada hace unos meses, debido al importante aumento de contagios experimentado en las últimas semanas, una situación que ha vuelto a encender las alarmas pese a la menor gravedad actual. Esta coyuntura ha hecho que en el cierre del año y en el inicio de 2022 todo esté de nuevo pendiente de la crisis sanitaria, aunque no hasta el punto de los primeros meses de la pandemia.
Balance del 2021
Y por el camino, Chiclana, como la gran mayoría de ciudades, ha vivido los últimos 12 meses en una montaña rusa de mejorías y empeoramientos en los diferentes sectores económicos, sociales y culturales, todos ellos condicionados por la subida o la bajada de los datos de contagios y de hospitalizaciones.
Pese a todo ello, la ciudad vuelve a cerrar el año con los mejores datos de crecimiento de la provincia, alcanzando los 86.306 habitantes a principios de 2021, 1.156 más que el año anterior, y con periodos muy esperanzadores en cuanto a los brotes verdes que se han vuelto a vislumbrar de cara al futuro y a la nueva etapa que se abra tras la pandemia.
Especialmente positivo ha sido en este año la recuperación de un sector vital para la ciudad como el turismo y todo lo que mueve a su alrededor, ya que el destino Chiclana ha conseguido firmar el mejor verano de su historia en cuanto a llegada de visitantes, volumen de negocio y repercusión en sectores como la hostelería, el inmobiliario, etcétera. La caída del turismo internacional a causa de la pandemia y la consolidación del destino, en el año en el que celebraba el 30 aniversario de Novo Sancti Petri, han propiciado que Chiclana contara con un balón de oxígeno fundamental en un momento global tan complejo como el actual.
Esto ha permitido que la localidad haya podido paliar en parte el duro repunte general del desempleo a causa de la crisis sanitaria y social, aunque las cifras en los meses en los que la estacionalidad sigue haciendo mella en el sector terciario hace prever aún una etapa difícil en cuanto a la recuperación del empleo.
El urbanismo ha sido otro de los grandes caballos de batalla este año, sobre todo en su segunda mitad, una vez que se notificó la firmeza de la sentencia que anulaba el Plan General de Ordenación Urbana por parte del Tribunal Supremo y con ello empezaba de nuevo todo un proceso de reordenación urbanística con vistas a los trámites necesarios para paliar las consecuencias de dicha medida judicial y para que la ciudad pudiera contar en el menor espacio de tiempo posible con un nuevo Plan.
Y entre tanto, Ayuntamiento y Junta han protagonizado no pocos intercambios dialécticos en cuanto a lo que mejor convenía sobre la redacción de las Normas Sustantivas o la aplicación de la nueva normativa autonómica, una disparidad de posturas que, en cualquier caso, tienen a la ciudad actualmente con la vigencia de las Normas Subsidiarias del 87 y todo lo que ello conlleva.
No obstante, desde el Consistorio se ha visto en esta situación una posibilidad de habilitar el acceso a los servicios básicos por parte de numerosas viviendas del diseminado que antes no podían hacerlo por este cauce, una medida en la que ya se trabaja desde la reciente anulación definitiva del PGOU.
La redacción del nuevo Plan General será pues uno de los principales proyectos de futuro para la ciudad en los próximos años, un documento sobre el que de nuevo se tendrá que planificar el desarrollo de los más importantes sectores y ámbitos económicos de la localidad.
Previsiones para el 2022
Y de cara al futuro más inmediato, Chiclana afronta este 2022 que ahora comienza pendiente de la aprobación de los Presupuestos municipales por parte del equipo de gobierno, algo que, según se ha anunciado, sucederá en los primeros días del mes de enero, y trabajando en un plan de inversiones procedentes de otras administraciones por encima de los 50 millones de euros, como el propio alcalde, José María Román, explicó durante una reciente intervención, "un plan de inversiones que ya están cerradas con otras administraciones y fondos europeos como los fondos FEDER, ITI, EDUSI, IDAE, etcétera", afirmó.
Así, entre los proyectos más inmediatos y que mayor repercusión estética y práctica tendrán en la ciudad se encuentran por ejemplo la reurbanización de la Alameda del Río, que pasará a contar con un diseño totalmente renovado y con utilidades destinadas a los diferentes grupos de población, o el centro de interpretación del yacimiento fenicio de El Castillo y la torre mirador que se construirá en el talud que une esta zona con la Avenida Reyes Católicos.
Se trata pues de dos ambiciosos proyectos que podrían cambiar de forma notable la fisionomía de dos de las zonas más tradicionales y populares del casco urbano y que persiguen revitalizar y dotar de mayor actividad y estética a un entorno que se antoja clave para el futuro más inmediato de la localidad, actuaciones que cuentan ya con los fondos para ello aprobados y que están previstas a lo largo de los próximos meses.
Otras iniciativas necesarias y que cuentan con los trámites avanzados de cara a su posible desarrollo en este 2022 son la nueva subestación eléctrica de La Pedrera, vital para garantizar el suministro a una ciudad cuyas infraestructuras en este sentido resultan ya desfasadas por el gran crecimiento experimentado; las mejoras en bloques de viviendas de barriadas populares de Chiclana como Recreo San Pedro, Caja de Ahorros, Fermesa o El Pilar; nuevas viviendas sociales a través de diversos proyectos en marcha o a punto de iniciarse; la ampliación y mejora del Centro Social El Olivo, en La Banda; la reapertura del centro deportivo Costa Sancti Petri tras su rescate municipal; la demandada construcción del nuevo Cuartel de la Guardia Civil o la definitiva puesta en marcha del tranvía de la Bahía de Cádiz, anunciado para los próximos meses.
De esta forma, 2022 llega con la vista de la ciudad puesta de nuevo en el turismo como tabla de salvación para seguir remontando en una coyuntura general de gran complejidad debido a la pandemia y a la crisis social y económica generada por ésta, un sector que buscará seguir consolidando la cada vez más pujante oferta sustentada en pilares como el litoral, la planta hotelera, la oferta gastronómica y de ocio y propuestas como la del Concert Music Festival que se celebra en Sancti Petri. Este evento protagonizará en 2022 su consolidación definitiva para convertirse en el mejor festival musical de España y uno de los más completos del mundo, con artistas y grupos nacionales e internacionales de primer nivel como Marc Anthony, Carlos Vives, Maluma, Texas, Black Eyed Peas, Sting, Antonio Orozco, Malú, Dani Martín y un largo etcétera.
Sin duda, un año en el que la ciudad, como el resto del mundo, tendrá la esperanza puesta en la evolución favorable de una pandemia que permita dejar atrás de forma definitiva una de las peores etapas de la historia reciente y empezar a construir los cauces para el desarrollo futuro de la localidad.
Temas relacionados
1 Comentario