Un parque eólico marino flotante sería mucho menos visible desde la costa de Cádiz y Rota
La mayoría de las empresas españolas del sector trabajan en ello, dicen desde la Asociación de Energías Renovables de Andalucía
Esta solución supondría carga de trabajo y empleo en el sector naval, según apunta Pedro Mayorga, delegado de Energía Marina del clúster andaluz
Los ecologistas insisten en que lo crucial no es el impacto visual, sino el ambiental sobre las aves, las dudas sobre la capacidad de evacuación de la energía y la falta de debate y participación social
Un parque eólico marino flotante permitiría instalarlo más alejado de la costa de manera que su impacto visual sería mucho menor que el que tramita la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz e impulsa la empresa Bahía de Plata Real State SL a apenas cuatro kilómetros de la playa de La Costilla de Rota y a seis de La Caleta de Cádiz, sustentado en monopilotes hincados en el fondo marino.
De hecho, la mayoría de las empresas españolas del sector trabajan en este otro tipo de solución que, además, genera carga de trabajo y, por lo tanto, empleo y oportunidades a la industria naval, como demuestra el hecho de que en la Bahía de Cádiz se hayan construido ya elementos para parques eólicos marinos flotantes instalados en el Mar del Norte. Esto es lo que se desprende de lo manifestado por Pedro Mayorga, delegado del área de Energía Marina de la Asociación de Energías Renovables de Andalucía, Claner, y presidente y director técnico de Enerocean, en unas declaraciones realizadas ayer a Radio Cádiz.
“Mi empresa fue la primera que instaló un prototipo flotante de eólica marina en Canarias en 2019 y ya se han montado los primeros parques comerciales en Escocia y Portugal. Una de las unidades se ha fabricado en Cádiz y otras en Galicia. Tenemos delante una oportunidad para el sector naval muy importante y vemos que las condiciones de la Bahía de Cádiz son fundamentales para conseguir que se pueda liderar este movimiento industrial”, afirmó Pedro Mayorga.
El experto explicó que la Bahía de Cádiz es “una zona de aguas poco profundas “, que son las idóneas “para utilizar cimentaciones fijas, una solución hoy más desarrollada” que las plataformas flotantes. “Pero la mayor parte de las empresas españolas estamos trabajando en soluciones flotantes que no están limitadas” por ese condicionamiento de la escasa profundidad del fondo marino.
Respecto al impacto visual que generaría el parque eólico marino que tramita la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz y al que se oponen los alcaldes de Rota, El Puerto y Cádiz, el delegado del clúster andaluz Claner respondió que [los aerogeneradores] “verse, se van a ver. Lo que hay que hacer es un estudio de impacto y de visibilidad serio de forma que entendamos que esos elementos van a cambiar la fisonomía [del paisaje] y por eso [el proyecto] debe ser evaluado por técnicos expertos”.
A este respecto, el portavoz de Ecologistas en Acción, Daniel López Marijuán , apuntó que “es verdad que el proyecto realmente tiene un impacto serio, pero el paisajístico no es el más relevante, aunque con todo sea notable. Evidentemente el paisaje tiene que ser un bien a proteger, pero lo que vamos a ver es, por así explicarlo, son 18 palillitos de una altura de un centímetro a medio metro de distancia, a lo que es alargar el brazo”.
“El impacto fundamental es sobre todo sobre la avifauna. Es una zona de migración de aves, algunas en peligro de extinción, como la pardela balear, y el impacto sería bastante incompatible”, añadió el portavoz ecologista. “Aparte de que seguimos dudando de la solvencia técnica de esta promotora y de que tenga capacidad de evacuación de esa energía generada, además de que no ha habido ningún debate ni participación efectiva de los agentes sociales implicados. En definitiva, hay muchas incertidumbres y muchos argumentos para oponerse al parque. Pero mantenemos que la energía eólica marina ha venido para quedarse y que es necesario implantarla, pero implantarla bien”, concluyó López Marijuán.
En el mismo sentido se pronunció el delegado de la Asociación de Energías Renovables de Andalucía. “Es bueno avanzar en la implantación de parques de energía eólica marina por tres razones fundamentales: hay que avanzar en la deascarbonización, en conseguir un suministro de energía limpia. Además así evitamos dependencias exteriores, porque uno de los problemas que tenemos en el coste de la energía en España es que no son recursos que tengamos en nuestro país. Estamos alimentándonos de gas natural que hay que importar y eso no genera una riqueza significativa en el país, mientras que la explotación de las renovables se queda aquí, es un recurso endógeno. Y luego, la gran oportunidad de empleo y de desarrollo para la industria de renovables y para la industria de construcción naval. Y eso en Cádiz, por ejemplo, supone grandes cifras”.
En el mar el viento puede dar hasta 4.500 horas anuales a plena potencia frente a 3.000 en tierra
La principal ventaja de los parques eólicos marinos frente a los terrestres es que en el mar los vientos soplan de manera más constante y con más energía que en tierra, explicó ayer Pedro Mayorga, delegado del área de Energía Marina de la Asociación de Energías Renovables de Andalucía, Claner, a la revista radiofónica especializada en temas marítimos Puerta del Mar.
“Normalmente, cuando hablamos de condiciones de viento se suelen medir el rendimiento y la forma de producción de los equipamientos por el número de horas anuales de funcionamiento a plena potencia. Y mientras que en tierra 3.000 horas anuales suponen un buen proyecto, en el mar estamos hablado de 4.000 y 4.500 horas al año. Eso significa que [los parques eólicos marinos] están produciendo el 50% del tiempo a la máxima potencia”.
“Eso es importante porque vamos a conseguir desplazar la necesidad de otros medios de generación más contaminantes y porque hacerlo en el mar significa que podemos contar con menos elementos, con lo cual, el impacto ambiental se reduce”, añadió. “Esos elementos flotan y se utiliza para eso una logística de grandes piezas que se generan en torno a área portuarias, de manera que tenemos la ventaja de que no hay que montar carreteras ni caminos para llegar a ellos. Eso sí, tiene las dificultades del trabajo en el mar, que es un entorno duro”.
Respecto a los beneficios de estas instalaciones para la pesca que argumentan los expertos, Pedro Mayorga comentó que “en España hay poca experiencia porque hay pocas plantas de este tipo, pero en los países donde hay muchas como, en el norte de Europa o China, que lidera este segmento, es que son positivas para la pesca y en global, para el medio ambiente es positiva. En el área reducida del parque no se permite la pesca y esa zona se convierte en un área de recuperación de especies que permite repoblar luego los caladeros cercanos. A medio y largo plazo, el efecto es muy positivo y en el corto, sólo hay que delimitar una pequeña zona. Se generan moluscos, peces, que atraen depredadores, según los estudios de los expertos en medio ambiente marino”.
No obstante, el presidente de la patronal pesquera andaluza, José María Gallardo, ha pedido una regulación que no perjudique al sector. “Los parques eólicos marinos son una amenaza más para las actividades del sector pesquero y lógicamente lo que nosotros pedimos son garantías de que la instalación de estas plantas de energía renovable, ante las que no estamos en absoluto en contra, no van a imponer todavía más restricciones a la actividad pesquera”, dijo. El colectivo ha solicitado reuniones con el Ministerio de Pesca y el de Transición Ecológica.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por Turismo de Ceuta
Contenido ofrecido por CEU en Andalucía