Uno de los ingredientes que nunca ha faltado en las siete ediciones que llevamos ya del festival No Sin Música en Cádiz es el rock. Por su escenario principal y secundario han pasado nombres conocidos y emergentes que han dejado patente que en nuestra ciudad este género musical atrae público y es un potente reclamo para la oferta cultural veraniega.

“Señores pasajeros, le damos la bienvenida a este vuelo rumbo al rock”, anunciaban desde el escenario justo antes de la aparición del grupo Vuelo 505, un preludio a una noche dedicada a los sonidos más potentes de tres formaciones provenientes del norte de España que vinieron a Cádiz a dar y recibir calor. Cádiz, precisamente, fue la palabra más repetida por el vocalista de la banda de Logroño, que incluso introdujo en muchas de sus canciones. Entre esa composiciones sonaron, para deleite de la audiencia que fue llenando paulatinamente el recinto, Con el viento a favor, Las arrugas de mi voz, Desaprender lo aprendido –“para ser feliz, solo hacen falta dos palabras: aquí y ahora”, decía el cantante Rubén Fernández antes de ejecutar la melodía–, Una casa en ruinas o El camino de vuelta.

La formación pidió un fuerte aplauso para El Dromedario Records por “seguir peleando por las bandas de rock de verdad”.

Y rock de verdad, en melodías y energía, fue lo que dio la banda navarra Bocanada. Su líder, Martín Romero, demostró ser un auténtico ciclón en directo. Sin parar quieto un segundo miró al público fijamente, le bastaron únicamente dos temas para arrancarse la camiseta que llevaba del grupo Korn, se atusaba la barba, saltaba, rodaba –literalmente– por el suelo, perseguía a sus músicos y se sentaba sobre la máquina de humo sin dejar de escupir canciones como truenos. Entre ellas Cuesta arriba, Más animal, Gallo de pelea, La madriguera o Río, que compartió con el líder de Marea, Kutxi Romero.

Era Marea, sin duda, el principal reclamo de la noche de ayer en el NSM, cita a la que recalaron para presentar su último disco El azogue. El público vibró frente a los navarros en el escenario principal del festival gaditano con un repertorio que incluyó temas como El temblor, Muchas lanzas, Pájaros viejos, La rueca, Pecadores o Un hierro sin domar.