"No queríamos dejar pasar otro año sin dar su sitio a la literatura y a los libros". La concejala de Cultura, María José Foncubierta, exponía así la intenciones del gobierno municipal de desarrollar una cita literaria que con sus limitaciones ha intentado mantener vivo el espíritu de la Feria del Libro que no se celebra en San Fernando desde el año pasado, y con la pandemia del covid-19 como principal motivo. Esta tradición se ha sustituido este año por la Semana del Libro que ha organizado actividades para niños y adultos: desde cuentacuentos hasta la presencia de escritoras como la gaditana Rosario Tey o la gallega María Oruña. Los escritores de la tierra también han tenido hueco para hablar de su experiencia, sus gustos, sus reivindicaciones o su visión del mundo literario de la ciudad.

Dirigida por la comunicadora Ana Julia Muñoz, Enrique Montiel de Arnáiz, Carmen Orcero y Daniel Fopiani protagonizaron esta semana una mesa redonda donde San Fernando estuvo muy presente. Se recordó, por ejemplo, la revista literaria que el gaditano Fopiani sacaba con otros amigos amantes de la literatura y que repartía en peluquerías, carnicerías y otros comercios. "Con 20, 21 años me reunía con cuatro o cinco amigos para hablar de libros. Todos hacíamos nuestros pinitos escribiendo y echábamos de menos una revista sobre literatura que llegara a la gente. Durante cinco años repartimos 2.000 ejemplares mensuales, cuya impresión costeábamos con el patrocinio de las tiendas. Tenía relatos o algunos poemas", comenta Daniel Fopiani.

En esa línea Montiel de Arnáiz mencionó una publicación que en 1996 el Patronato de Juventud editó con fondos de la Junta de Andalucía. Cuatro tomos bajo el nombre Jóvenes Escritores. Generación siglo XXI, que incluía relatos, cuentos, teatro, poesía o cómic de estas promesas de las letras. "Yo presenté un cuento y un cómic y salí en dos de los cuatro tomos", rememoró, antes de plantear que se recuperaran este tipo de iniciativas como forma en el que los escritores noveles puedan ver publicados sus primeros textos. La concejala de Cultura, presente en la cita, tomó nota de la idea.

La conductora del acto preguntó por la presencia de San Fernando en sus obras

No fue la única reivindicación que el escritor isleño lanzó durante sus intervenciones en la mesa redonda. También reclamó que la necesidad de que San Fernando potencie su tradición literaria, poniendo en valor, por ejemplo, la figura de Luis Berenguer, su obra y su legado. "La pena es que Luis Berenguer no haya sido comparsista o cargador", apuntó para mostrar la falta de reconocimiento de la sociedad para un literato frente a otros ámbitos culturales o tradicionales.

Montiel de Arnáiz echa en falta el desarrollo de talleres de lectura, de escritura o cuentacuentos. "Yo iba de niño a la biblioteca. Por eso he dicho que me gustaría que se potenciara, que tuviera más vida, porque últimamente solo son salas de estudio", señala mientras hace balance de este encuentro en el que los tres escritores se describieron como voraces lectores desde la infancia.

Montiel de Arnáiz reclamó la organización de talleres de lectura y escritura en la biblioteca

"En mi adolescencia yo tenía de referente a escritores locales, y las tertulia literarias locales", expuso Carmen Orcero, que contestaba a algunas de las preguntas que la conductora del acto presentó como punto de partida de la conversación: cuándo comenzaron a escribir, qué hay de San Fernando en sus obras. "Uno se sienta a escribir cargado con una mochila y en ella lleva su infancia, su tierra, lo que ha vivido, lo que ha viajado, lo lleva todo. En mi caso, como siempre que escribo una novela procuro hacer un homenaje, una de ellas es precisamente un homenaje a San Fernando. En Un titular para un crimen el contexto es el San Fernando de 1881", detalló Orcero.

Fopiani, que nació y creció en Cádiz, se ha visto más influido por su ciudad natal. Aun así adelantó que en su siguiente trabajo, que podría estar para el próximo enero o febrero, La Isla será protagonista "porque la Infantería de Marina, yo soy sargento, va a estar presente, también el Tercio de Armada". Por su parte, Enrique Montiel de Arnáiz mencionó algunos de sus escritos, como los relatos Bulerías Nazis o El Puente Zuazo, o la ficticia La Baraka, "todos saben que es San Fernando mezclado con La Línea o Marbella”, para reconocer que "nuestra patria influye".

Los escritores destacan la implicación de los asistentes que introdujeron en el debate con sus preguntas cuestiones como la situación de las mujeres escritoras.