El puño americano: Una peligrosa arma ilegal capaz de romper huesos

En uno de los últimos sucesos en Cádiz, el puño americano fue utilizado para agredir brutalmente a un conductor de ambulancias, dejándole fuertes heridas. Este arma es difícil de conseguir, ya que está prohibida por su alta peligrosidad.

Para hacerse con algo así, el agresor, un joven del que aún no se conoce la edad, debió recurrir al mercado negro para conseguirla. Pues basta una simple búsqueda en Internet para percatarse de que no hay posibilidad de adquirir este objeto mortal. Lo más cercano, son llaveros y artículos con decoraciones que juegan con la idea de tener un puño americano. ¿Por qué razón hay souvenirs en venta de un arma que hace tanto daño? Por la misma que hay juguetes de pistolas y otras tantas armas.

El puño americano goza de popularidad en cierto público por su estética y por el uso que se ha hecho de él en la cultura pop. En numerosas series y películas, los personajes de ficción realzan la violencia de sus golpes de gracia con este objeto para mostrar una imagen más fiera e intimidante. Sin embargo, esto es la realidad y un arma tan peligrosa como esta es ilegal en casi todos los países. Salvo en el estado de Texas, en EEEU, donde se entendió que por defensa propia el puño americano podía venderse.

¿Cómo es un puño americano?

Es un arma contusa formada con una estructura que se ajusta a la mano de quien lo porta, más bien a los nudillos. De esta forma, quedan los dedos recubiertos de este objeto metalizado, multiplicando la peligrosidad de cualquier golpe. De hecho, puede llegar a romper huesos, debido a la brutalidad de los impactos con esta arma.

Por esa razón, el puño americano está en la lista de Interior de armas blancas prohibidas y su comercialización es ilegal. En España la compra de armas solo está limitada a aquellas personas con licencia, las cuales se conceden a un grupo muy reducido.

Otros sucesos para el recuerdo con puños americanos

En muchas ocasiones, incluso se personaliza este objeto con el ánimo de incrementar su capacidad de hacer daño. Por ejemplo, hace unos meses en Cádiz, se intervino un puño americano con navaja. El sujeto, sabedor de la ilegalidad de portar un arma como esa, en el momento previo a ser cacheado por los agentes policiales tiró este objeto por encima de una verja. Sin embargo, los policías se percataron de ello y procedieron a interponerle una sanción administrativa por portar dicha arma.

Esta otra historia ocurrió en París en 2013 y tiene a un francés con origen gaditano como protagonista. Esteban M., nacido en Cádiz en 1992, es un neonazi con cabeza rapada que mató con un puño americano, según testigos, a un joven de extrema izquierda tras una discusión. Por supuesto, ese puño americano tampoco debía de estar en esa mano.