El Estatuto de los Trabajadores lo confirma: multas de hasta 7.500 euros por enviar mensajes fuera del horario laboral

La normativa ampara el derecho a la desconexión digital y contempla sanciones para las empresas que lo vulneren

¿Qué es un protocolo de desconexión digital y por qué deben implementarlo las empresas?

La vicepresidenta del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. / Mariscal / Efe

Desconectar del trabajo es complicado en ocasiones cuando aparece una llamada o un WhatsApp a deshora del jefe, pero todas aquellas personas que viven estas situaciones, podrán ver cómo pronto esto cambia. La legislación laboral española lo deja claro: los trabajadores tienen derecho a la desconexión digital una vez finalizada su jornada laboral.

Así lo establece el Estatuto de los Trabajadores y la Ley Orgánica de Protección de Datos Personales y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD), que amparan a los empleados frente a interrupciones fuera de su horario. Las empresas que no respeten este derecho se arriesgan a multas que pueden alcanzar los 7.500 euros.

El concepto de desconexión digital implica que, salvo circunstancias excepcionales, ningún empleado debe recibir llamadas, mensajes de WhatsApp, correos electrónicos u otras comunicaciones laborales fuera del tiempo estipulado en su contrato. Esta medida no solo protege la salud mental del trabajador, sino que también fomenta un entorno de trabajo más respetuoso y productivo.

El Estatuto de los Trabajadores establece claro en el artículo 20 bis titulado "Derechos del trabajador a la intimidad con relación al entorno digital y la desconexión" que los empleados "tienen derecho a la intimidad en el uso de los dispositivos digitales puestos a su disposición por el empleador para el desarrollo de su actividad laboral". Además, añade que "los trabajadores tienen derecho a la desconexión digital fuera de su tiempo de trabajo en los términos legales o convencionalmente establecidos".

Esta norma obliga a las empresas a establecer políticas internas que regulen el uso de dispositivos digitales con el objetivo de garantizar que los trabajadores no se vean obligados —ni presionados— a atender asuntos laborales fuera de su horario. Además, el Estatuto de los Trabajadores respalda este derecho como parte de la protección de la jornada laboral y el tiempo de descanso.

Sanciones de 7.500 euros para quienes lo incumplan

Las sanciones previstas para las compañías que vulneren este derecho pueden clasificarse según la gravedad de la infracción. En el caso de faltas leves, las multas van desde los 70 hasta los 750 euros. Las infracciones graves pueden suponer sanciones de entre 751 y 7.500 euros, cantidad máxima que contempla la legislación. Esta cuantía puede incrementarse si se demuestra reiteración o afectación a un colectivo amplio de empleados.

Es importante subrayar que este tipo de sanciones se aplican tras una denuncia y la correspondiente investigación por parte de la Inspección de Trabajo. El trabajador afectado puede presentar una queja formal si considera que se ha vulnerado su derecho a desconectar fuera de horario. También es aconsejable conservar pruebas, como mensajes o correos enviados fuera de la jornada laboral, para respaldar la denuncia.

Además, la ley exige que las empresas elaboren un protocolo específico sobre el uso de dispositivos digitales y que informen adecuadamente a sus empleados. En muchas ocasiones, el incumplimiento se produce por la falta de formación interna o por una cultura empresarial que no respeta los límites del tiempo libre. Por ello, se recomienda que los departamentos de recursos humanos trabajen activamente en la implementación de estas medidas para evitar conflictos.

Este marco legal cobra especial relevancia en un contexto en el que el teletrabajo y la flexibilidad horaria están cada vez más extendidos. La línea entre el trabajo y la vida personal se difumina fácilmente si no existen límites claros. Por ello, la desconexión digital no debe interpretarse como un privilegio, sino como un derecho laboral fundamental.

En definitiva, enviar mensajes fuera del horario laboral no solo es una práctica poco ética, sino que puede salir cara. Las leyes españolas son tajantes: el tiempo de descanso debe respetarse, y cualquier intromisión puede derivar en multas económicas para la empresa

4 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último