El Cádiz CF alcanza este martes el ecuador de la Liga. Y lo hace en una situación extraordinaria, mucho mejor de lo que se podía pensar para un recién ascendido que cuenta con uno de los proyectos más modestos de la élite. Los amarillos esperan al Levante (19:00 horas) para echar el telón a la primera vuelta, en busca de otro aire al que 'sopló' frente al Girona en la Copa del Rey. Vuelven muchos titulares y debe regresar el espíritu de la competición liguera. Todo ello en una jornada que, sin duda, viene marcada por las ausencias en el conjunto gaditano.

Si a comienzos de Liga se lanza con convencimiento que al llegar la jornada 19ª el equipo cadista iba a estar en novena posición, con 23 puntos (algo más de la mitad de lo que necesita para obtener la salvación), siete por encima de la zona de descenso y viendo por detrás a conjuntos como Athletic, Valencia, Betis o Getafe, la reflexión habría sido tildada de locura. Pero es la realidad, bendita realidad para el Cádiz CF.

El examen de este martes tarde tiene bríos de encuentro de doble responsabilidad porque el Levante también está llamado a pelear la permanencia en la Liga de las Estrellas. Un adversario con más experiencia en Primera en los últimos años pero que siempre compite cada temporada en el filo de la navaja de los 'pobres', aquellos que aspiran a seguir en la categoría.

El reto de ganar dos encuentros consecutivos siempre es mayúsculo. Si, además, se trata de buscarlo en Primera División, el objetivo aumenta de dificultad de forma considerable. El equipo de Álvaro Cervera dio buena cuenta del Alavés (3-1), cuando parecía que el choque se podía atascar. El triunfo más claro hasta el momento en el Ramón de Carranza, choca de frente con lo sucedido en la Copa del Rey por la derrota y la eliminación, así como por las sensaciones.

Tener en el casillero 26 puntos en mitad de la Liga sería fantástico, un gran paso ante una segunda vuelta que siempre se hace larga, aún más para un conjunto como el Cádiz CF, cuyo desgaste físico exige un fondo de armario en cuanto a cantidad y capacidad de sacrificio. No obstante, siempre es mejor afrontar la segunda parte de la temporada con unos números que invitan al optimismo y que, por el momento, alejan cualquier síntoma de ansiedad por sufrir una angustiosa situación clasificatoria.

La carga de partidos de las últimas semanas y las ausencias se dan la mano este martes en el conjunto gaditano. La Copa del Rey es ya historia, si bien es una realidad que hace tres días Cervera y sus pupilos estaban en la otra punta de España y que sólo han tenidos dos sesiones de trabajo para preparar el encuentro.

La confirmación de que el último positivo es Pacha Espino se une como baja a los lesionados Akapo -pendiente de la probable gravedad de la dolencia sufrida en Montilivi-, Marcos Mauro, José Mari y Augusto Fernández. Además, hay que recordar que Fali cierra ciclo de amonestaciones y tiene que cumplir sanción en el partido que despide la primera vuelta.

Con este escenario el entrenador ha dado a conocer una convocatoria inicial de 24 hombres en la que están todos los aptos del plantel profesional y cuatro canteranos (Flere, Momo Mbaye, Saturday y Marc Baró). Existen varias cuestiones por resolver de cara al once, aunque la más inquietante apunta al puesto de lateral izquierdo. Pacha Espino es el único jugador específico para esa posición, por lo que entre Marc Baró y Jairo debe salir el elegido para sustituir al uruguayo. Ambos jugaron en la Copa frente al Girona.

A partir de ahí, corresponde suplir al Fali en el doble pivote y ver si el estado físico de Salvi -recuperado hace unos días de Covid- es el adecuado para salir de inicio en el once amarillo.

Alineaciones probables

Cádiz: Ledesma, Iza Carcelén, Cala, Alcalá, Marc Baró, Garrido, Jonsson, Perea, Álex, Lozano y Negredo.

Levante: Aitor, Miramón, Vezo, Postigo, Clerc, De Frutos, Malsa, Radoja o Melero, Morales, Roger y Dani Gómez.

Árbitro: Del Cerro Grande (madrileño).

Estadio: Carranza (19:00/Movistar LaLiga).