Álvaro Giménez ha pasado en poco tiempo de no ser candidato a salir en enero a contar con serias opciones de cambiar de aires a mitad de temporada. El Cádiz CF quiere hacer hueco en su plantilla para reforzarse con varios jugadores pero para ello necesita prescindir de algunos en la recta final del mercado de invierno.

El delantero lo tiene complicado para disponer de minutos tras la llegada de Ivan Saponjic y la titularidad que ostentan Choco Lozano y Álvaro Negredo. El serbio tiene unas características similares a las suyas.

De hecho, el ilicitano no ha gozado de mucho protagonismo en el primer tramo de la campaña 2020/21. Hasta 18 compañeros han estado más tiempo sobre el césped en la Liga que él, que lleva 404 minutos aunque con dos goles en su cuenta: el que marcó en el partido ante el Elche y el que firmó en el choque contra el Barcelona.

Álvaro Giménez ha participado en 11 encuentros del campeonato, sólo tres en el once inicial. En la Copa del Rey disputó dos partidos tres partidos (dos como titular).

El ariete tiene muchas papeletas para salir pero el interrogante es cuál es su destino. El Mallorca (segundo clasificado de LaLiga Smartbank) se ha interesado por sus servicios pero en principio no es la primera opción del club balear, que está tratando de fichar a Sylla, artillero del Girona.

Hay otras posibilidades de Álvaro Giménez en Segunda División A. La posible marcha de Campuzano del Espanyol lleva al conjunto catalán (líder del torneo en la categoría de plata) a otear el mercado en busca de un delantero y es cuando aparece en escena el atacante del Cádiz CF.

El Almería (tercero en la tabla) también pretende apuntalar la delantera y se fija en Álvaro Giménez, pendiente de su situación.

Los equipos que pujan por el ascenso a Primera División podrían pescar en el caladero cadista. En el caso de Álvaro Giménez, tendrá que ser una operación a tres bandas que dejara satisfechos a los dos clubes y al jugador.

En el caso de que Álvaro Giménez se marcha del Cádiz CF en el mercado de invierno, la duda es cuál sería la fórmula para su salida. Tiene contrato hasta el 30 de junio de 2023 tras la opción de compra obligatoria (algo más de dos millones y medio de euros) que ejerció la entidad cadista tras dar el salto a Primera, como recogía el documento de cesión procedente del Birmingham City.

No parece fácil que el ariete pueda a salir traspasado ni tampoco una cesión de fichaje obligado en caso de ascenso. La solución podría ser un préstamo con regreso a final de temporada, aunque en el mercado nada puede ser descartado de antemano.