Cadismo puro en Medina
La peña asidonense Manuel Irigoyen nació hace 25 años fruto de la gran afición que despertaba el equipo amarillo en el municipio jandeño
Con diversos actos conmemorativos, la peña cadista Manuel Irigoyen de Medina Sidonia celebra este fin de semana sus primeros 25 años, que se remonta allá al mes de enero de 1990 cuando un grupo de socios y locos por los colores amarillos y azul de la indumentaria del Cádiz decidieron crear la primera entidad de este tipo en la provincia, más allá de las fronteras puente Zuazo, como decían más de uno. Unos años antes, a raíz del primer ascenso Primera División, en la capital gaditana se había constituido la peña Enrique Mateos.
Quién mejor que Manuel Benítez Mora, primer vicepresidente y después presidente durante más de una década, para recordar cómo y de qué manera un grupo de socios y simpatizantes, decidieron dar el paso y constituirla. Benítez rememora que en el verano del 90 un grupo de socios y simpatizantes del equipo amarillo, entre ellos Rafael Doblas, Antonio Guerra, Juan Quintero, Manuel Maeztu y Gregorio de Tejada, Luis Manuel Guerrero el loco, José Antonio Pérez el Chato, José Pérez el gafas o Juan Cepero, entre otros, dada la gran afición que había al equipo amarillo, deciden reunirse en un salón del Bar Cádiz y dar los primeros pasos para crear la peña.
En este encuentro se decide elegir como primer presidente de la gestora a Rafael Doblas por ser el socio con el número más antiguo del Cádiz de entre los asistentes a esta reunión. Cuando la peña fue legalizada por el entonces Gobierno Civil, pasó a ser oficial, legal y jurídicamente primer presidente de la peña Cadista Manuel Irigoyen. Lógicamente se decidió dar este nombre a la nueva entidad, por ser en aquellos momentos presidente del Cádiz Irigoyen, nacido en Medina Sidonia y que se marchó muy joven a Cádiz con su familia, como otras muchas.
En contra de lo que muchos pudieran pensar, si no hubiese existido la figura de Irigoyen, el presidente que más años seguidos mantuvo al Cádiz en Primera, la peña se hubiera constituido de igual manera, aunque con otro nombre.
Antes de la constitución de la peña Irigoyen, ya existía un grupo de socios y aficionados del Cádiz que se ubicaban en el Fondo Sur del Carranza, colocaban su pancarta y se hacían llamar Frente Asidonense, entre ellos, además de Manolo Benítez, Mendoza, Molino, Manolo Maeztu o el gordo de la Jarana, ente otros. El propio Benítez también tuvo relación y conoció a otros presidentes cadistas: José Antonio Gutiérrez Trueba, Vicente Alonso o Manuel de Diego. Algunos de estos aficionados asidonenses y otros que les antecedieron ya eran socios mucho antes de la inauguración del estadio Ramón de Carranza y los amarillos disputaban sus partidos en el antiguo Mirandilla.
Benítez recuerda que se empiezan a dar los primeros pasos para constituir la peña. Alquilan un local en el mismo centro de Medina, junto al Ayuntamiento. Allí permanece inamovible y activa con el paso del tiempo a pesar de las no pocas dificultades. Después fue la campaña de captación de socios y su creación oficial. Para ello se pone mano a la obra su secretario, Manolo Maeztu (a la sazón director de la Caja de ahorros de Jerez) que cuenta con la inestimable ayuda de Domingo Alcántara, uno de los fundadores de la peña Enrique Mateos, quien le asesora para elaborar los estatutos de la nueva entidad. La peña ya está constituida y en enero de 1990 se decide proceder a su inauguración oficial el 11 de enero de 1991. Dado que la sede social es incapaz de acoger a tantos socios, simpatizantes, aficionados y autoridades, el acto se celebra en el salón de actos del Hogar del Pensionista Nuestra Señora de la Paz, a escasos metros de nueva sede social de la peña. El acto fue presentado por Theo Vargas, también con raíces asidonenses (su madre natural de Medina).
Además del alcalde de entonces, Juan Cornejo López, el presidente de la entidad, Rafael Doblas con su junta directiva, los socios y simpatizantes, acudieron al evento el presidente del Cádiz, Manuel Irigoyen, acompañado por la totalidad de su junta directiva, cuerpo técnico y un grupo de jugadores de la primera plantilla.
Desde entonces, son 25 años de idilio, como en una buena pareja de enamorados con amores y desamores, polémicas, peleas y reconciliaciones, la peña Cadista asidonense y el club amarillo han ido de la mano, en defensa, amor y amparo al equipo amarillo, celebrándose innumerables actos, ayudas a la captación de socios para el club amarillo, aportando dinero, dentro de sus posibilidades, cuando el club cuando estaba casi arruinado, entre otras colaboraciones.
Los mejores momentos o más buenas relaciones de la peña con el Cádiz fue durante el periodo que presidió el equipo amarillo Manuel Irigoyen, que todos los años en el mes de agosto se desplazaba hasta la Iglesia Mayor acompañado de sus directivos y jugadores para hacer una ofrenda floral a la Virgen de la Paz, Patrona y alcaldesa Perpetua de Medina Sidonia, pidiéndole protección para la temporada y a fe que se conseguía el milagro, pues hasta nueve años seguidos mantuvo al club en Primera. El hermano del presidente cadista, Carlos Irigoyen que era habitual en los desplazamientos del equipo llevaba siempre en su cartera una imagen de la Patrona de su pueblo de nacimiento y siempre presumía de haberle dado suerte.
En agradecimiento a la devoción de los hermanos Irigoyen y otros directivos y socios del Cádiz a la Virgen, la Hermandad de la Patrona y Alcaldesa Perpetua, el hermano mayor, Juan Manuel Moreno Acosta y junta de gobierno, se desplazaron en un emotivo acto a la sede social del Cádiz, entonces en la calle Cánovas del Castillo 21, donde les hicieron entrega de un magnifico cuadro bellamente enmarcado y dedicado, que desde entonces presidía el despacho presidencial del máximo responsable del club amarillo y que exhibía con orgullo.
Posteriormente las relaciones han seguido siendo buenas, con momentos de altibajos, y queda pendiente un reconocimiento oficial e institucional, sincera y honesta y no para salir del paso, de la ahora Sociedad Anónima Deportiva a los grandes y buenos servicios que la peña más antigua de la provincia ha prestado a la entidad.
No hay comentarios