La Residencia Militar pinta el interior del fuerte histórico con dibujos Disney

Parte de la muralla que delimita una zona descubierta de la Residencia Militar de Cortadura está decorada con personajes de Disney. Desde el centro aseguran que los dibujos no afectan en nada a la muralla, sino a mampostería, algo que Ayuntamiento y Cultura analizarán ahora.

Las fotos que ilustran esta página han sido remitidas por un ciudadano al Ayuntamiento de Cádiz. Esta persona tuvo acceso al fuerte y se asombró al ver la muralla cubierta por estos dibujos, por lo que tomó las imágenes y las envió al equipo de gobierno municipal.

En el Ayuntamiento, el teniente de alcaldesa delegado de Patrimonio, José Blas Fernández, explica que ahora se realizará una inspección urbanística en el edificio para ver qué se ha hecho. En el caso de que se compruebe que la pintura afecta a la muralla, se denunciará a la Delegación Provincial de Cultura, que es quien tutela los Bienes de Interés Cultural.

De momento, Cultura asegura que a ellos no se les ha pedido autorización para hacer nada en el fuerte de Cortadura, algo que es preceptivo para intervenir en él. Por lo tanto, la Junta anunciaba ayer que intervendría para investigar lo ocurrido y, en su caso, tomar las medidas oportunas, que incluyen sanciones.

Pero es que desde la Residencia Militar se asegura que en ningún caso se ha hecho nada en la muralla. El director, José Manuel Sánchez-Gey, explica que efectivamente existe el mural en el interior del patio, pero que la zona que está pintada es "mampostería, no es la muralla". La parte superior, indica, sí forma parte de la fortificación, motivo por el que se ven las almenas sobre los dibujos.

"Los dibujos no están afectando a la muralla, la zona donde están no es parte de ella", aseguró Sánchez-Gey, quien indicó que Defensa "no ha hecho nada que pudiera afectar" a la histórica construcción, que data de principios del siglo XIX, de tiempos de la Guerra de la Independencia.

El director recordó al Ayuntamiento que tiene un convenio suscrito desde el año 98 para arreglar el conjunto de la muralla por lo que, a su juicio, lo que tienen que hacer los responsables municipales es eliminar las pintadas que han aparecido en el exterior de la muralla y que, esas sí, están realizadas directamente sobre la piedra.

De hecho, Sánchez-Gey explica que hace unos meses mantuvo una conversación con la alcaldesa con motivo de su nombramiento como director y le recordó ese compromiso, a lo que Teófila Martínez "me respondió que el presupuesto municipal estaba para la ciudad, no estaba para eso".

La pasada semana este periódico denunció la proliferación de pintadas en el exterior de la muralla. Entonces, el equipo de gobierno reaccionó recordando que llevaba años pidiendo que le cedieran el fuerte y asegurando que Defensa "ni come ni deja comer", esto es, ni lo arregla ni lo cede para que el Ayuntamiento lo arregle. A esas palabras respondía un día más tarde el concejal socialista Rafael Román asegurado que la culpa del estado de la fortificación no era de Defensa, sino de los gamberros, y que la cesión se haría pronto.

"Esto no es un acto de gamberrismo", afirmaba ayer José Blas Fernández en referencia al mural con motivos infantiles, y "ha sido realizado o permitido por el Ministerio de Defensa", por lo que "se comprueba que no es cierto lo que decían los socialistas".