El próximo lunes se reunirán en Sevilla representantes de la Junta, el Ayuntamiento, la Diputación y la UCA. El tema del encuentro es el futuro de la Facultad de Ciencias de la Educación y su traslado al edificio de Valcárcel, con un coste estimado de 40 millones de euros, que la administración regional considera que debe ser financiada por todas las administraciones.

Tras cuatro años de debates infructuosos, la reunión de este lunes se plantea como esencial para este proyecto.

"Va a ser la reunión definitiva para aclarar la decisión política sobre este plan. Si, tras la misma, se constata que es viable, el siguiente paso será el técnico para ver la redacción de los correspondientes convenios, lo que tampoco es sencillo", destaca este diario el rector de la UCA, Francisco Piniella.

¿Y si al final no hay acuerdo?¿Qué va a pasar con la nueva Facultad?

El rector responde con lo ya sabido: la respuesta la darán los órganos colegiados de la UCA, afirmando que "no tenemos un plan ‘B’", y recordando que la vigencia convenio de cesión del suelo con la Diputación concluye el próximo 17 de diciembre.

Piniella constata que la UCA tiene muy clara su política sobre este proyecto, y considera que el debate sobre Valcárcel no ha afectado para nada a la gestión de la Universidad en estos años. "Es un debate más mediático que de la propia UCA, pues aquí se cerró en su momento. Es un proyecto del equipo anterior (cuando era rector Eduardo González Mazo) que nosotros mantenemos, porque no consideramos que sea bueno paralizar los temas que quedan pendientes de otras etapas. Ahora entramos en una fase decisiva pendientes de la reunión del próximo lunes, en la que espero haya un acuerdo entre todos".

Aunque el equipo de gobierno no tenga un “plan B” si fracasa la operación de Valcárcel, lo cierto es que tiene que buscar una solución urgente ante el más que precario estado en el que se encuentra la actual Facultad de Ciencias de la Educación, ubicada de forma provisional desde hace décadas en el Campus de Puerto Real.

Evidencia Piniella que el edificio actual nació como Escuela de Magisterio, que hoy ha crecido como Facultad de Educación y en la que se han incrementado de forma más que notable los estudios que allí se imparten, con cerca de 3.000 estudiantes, lo que la sitúa como una de las más abarrotadas de toda la UCA.

El edificio, sobre el que se ha actuado en los últimos meses en obras de consolidación al existir una auditoría técnica que indica que está en malas condiciones, ya no puede ampliarse más, por lo que sería necesario levantar un equipamiento de nueva planta.

En la hipótesis del fracaso de Valcárcel y de la necesidad de levantar otro edificio, Piniella deja claro que será la UCA que decida su ubicación y no los políticos, aunque ya hay ayuntamientos como el de Jerez de la Frontera que han ofrecido suelo en sus términos urbanos.

Francisco Piniella, como rector, no entra a valorar si es más relevante ubicar en Valcárcel la Facultad o un hotel, como se planteó en 2004 y ahora vuelve a valorar la Diputación (propietaria del inmueble)."Creo que la Facultad (en Valcárcel) es un buen proyecto, bueno para la Universidad y bueno para la ciudad. Supondría culminar el cinturón universitario y revitalizaría esta zona de la ciudad, como pasa en universidades muy urbanas como Salamanca, Santiago o Granada".

En su día el Ayuntamiento y la Universidad firmaron un convenio para fortalecer el Campus de la capital. Uno de los proyectos que está en manos del gobierno local y que el Rectorado espera con cierta ansiedad es la conclusión del Teatro del Parque, financiado en parte con fondos de la propia UCA.