La crisis económica derivada de la pandemia del coronavirus se ha cobrado otra víctima en el paisaje comercial del casco histórico de la capital gaditana. La tienda de decoración y menaje de hogar Cuchara de Palo anuncia estos días en su escaparate la liquidación de su género por cierre. El 31 de julio este negocio será historia, sumándose a la larga lista de establecimientos que han dicho adiós en los últimos años. Cuchara de Palo, negocio regentado por Pilar y Noelia, abrió sus puertas en el año 2014 en el local que hoy ocupa la cafetería La Tertulia en la calle Ancha. Tres años después se mudaron a Valverde número 20, donde la tienda ha estado abierta por espacio de cinco años, entre las esquinas de las calles Novena y José del Toro.

Hasta finales de este mes mantendrá todos los artículos al 30%, 40% y 50% de descuento. Noelia y Pilar han dado las gracias a su clientela en las redes sociales, destacando el cariño recibido tras anunciar la triste noticia del cierre.

Mientras, muy cerca, en Ancha, donde estuvo tres años Cuchara de Palo, siguen produciéndose novedades comerciales. Es inminente la apertura de un establecimiento de la franquicia Martonela, una cremería-slow que es una combinación de heladería y crepería totalmente artesanal. Ocupa el local en el que estuvo Confecciones Lluch por espacio de 50 años, desde su inauguración en 1971.

Asimismo, también en la calle Ancha ha abierto la tienda de moda La Santa Street Wear en el espacio comercial que hasta hace unos meses regentaba el establecimiento de artículos de casa y jardín Full House. En el tramo de Ancha entre Sagasta y San José han caído La Barraca, La Casa de Dali, Sandro Ferrone, Milenium o Almacenes El Siglo. A este último local, emblemático durante décadas, se trasladará la tartería Dulcena, que actualmente ocupa un puesto del Mercado Central.

Este negocio de tartas se implantó en Cádiz en el año 2014 en la calle San José y desde entonces no ha dejado de crecer, ocupando en este último año el puesto número 84 del Mercado Gastronómico de la Plaza y manteniendo el horno en su antigua ubicación.

De la misma manera, en el local que dejó la juguetería Imaginarium opera desde hace poco tiempo el centro Ancha 4. Estética y Bienestar.