Fin a la polémica: no habrá impugnación del examen de Matemáticas Aplicadas en Selectividad

La Junta de Andalucía descarta finalmente impugnar el examen de Matemáticas Aplicadas de la Selectividad. A pesar del aluvión de críticas recibidas y de una petición ciudadana que ya supera las 19.000 firmas, la Consejería de Educación no tiene intención de anular el controvertido examen de Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales de la reciente Selectividad. Así lo ha confirmado la consejera de Desarrollo Educativo y Formación Profesional, Carmen Castillo, quien ha defendido tanto el contenido de la prueba como el proceso de elaboración.

El examen, que forma parte de la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), ha generado malestar entre numerosos estudiantes, quienes han denunciado su elevada dificultad a través de plataformas como Change.org. Sin embargo, desde la Consejería se insiste en que la prueba se ajusta "estrictamente al currículum" y, por tanto, es válida desde el punto de vista académico.

“Tienen que estar en el currículum y tienen que examinar sobre eso; en el caso contrario no sería válido”, ha recalcado Castillo. Además, ha subrayado la necesidad de respetar el trabajo del profesorado: “Los exámenes los elaboran docentes. Hay que respetar su trabajo, aunque no estemos de acuerdo o aunque el resultado no haya sido el esperado”.

También ha explicado que el diseño de las pruebas no es arbitrario, pues cada octubre, el Gobierno central establece las matrices de contenido que deben regir los exámenes de Selectividad en todo el país. A partir de esas directrices, grupos de trabajo integrados por profesores de secundaria, bachillerato y universidad elaboran los distintos modelos de examen durante el curso.

Castillo ha destacado que las nueve universidades públicas andaluzas participan en este proceso, lo que garantiza, a su juicio, el conocimiento profundo del currículo y la realidad educativa de la región. “Quienes han elaborado la prueba conocen lo que se imparte en los centros andaluces”, ha puntualizado.

Mientras se mantiene la convocatoria de oposiciones docentes y se niega que exista un “efecto llamada”, la Junta cierra filas en torno a una Selectividad que, aunque polémica, consideran plenamente legítima.