El colegio Raimundo Rivero ha acogido uno de los primeros talleres sobre igualdad que desarrolla la Concejalía de la Mujer en San Fernando en centros de Primaria y Secundaria, con el objetivo de crear modelos relaciones sanas basadas en la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres. La concejala de Mujer, Virginia Barrera, ha acudido al centro.

Durante este mes de abril han comenzado estas acciones formativas que forman parte de la oferta educativa de la Concejalía dentro de las actividades organizadas con motivo del 8-M, Día Internacional de la Mujer. Hasta final de este curso se van a desarrollar 130 talleres centrados en la educación emocional, 70 de ellos en colegios de Primaria, y dirigidos al alumnado de primero y segundo curso; y otros 60 talleres para el primer ciclo de Secundaria.

El alumnado recibirá formación sobre emociones libres de estereotipos de género, en la afectividad sin sesgos sexistas y en la empatía para el fomento de valores que impulsen la prevención en violencia de género. Barrera explica que la propuesta para Primaria se denomina El botiquín de las emociones, mientras que a de Secundaria se titula Siente y expresa en igualdad. Además ya se celebró las charlas sobre Buenos tratos: cuidando las emociones en familia, dentro del Programa Escuela de Educación Emocional, para las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPAS).

"El objetivo de esta oferta educativa es el trabajo de la educación emocional entre el alumnado. Es fundamental que llevemos y reforcemos en los colegios e institutos contenidos como la coeducación, la resolución de conflictos y los nuevos modelos igualitarios en las relaciones entre niñas y niños", comenta Virginia Barrera. "A través de diferentes dinámicas muy participativas y de trabajo cooperativo y grupal, usando herramientas digitales y el lenguaje que alumnos y alumnas conocen bien, desde la diversión y lo lúdico en algunos casos, vamos a poder promover una cultura igualitaria, interiorizar el respeto a la diferencia; fomentar conductas que mejoren las relaciones en su entorno mientras adquieren habilidades y conocimientos emocionales; promover conductas respetuosas, empáticas y solidarias; enseñarles a reconocer y utilizar el lenguaje emocional y a reconocer las emociones de las otras personas; y enseñarles a tener una actitud positiva ante diferentes situaciones en la vida", detalla la concejala.