El cambio de concesión del antiguo depósito portuario ubicado  junto a la Plaza de Las Galeras, conocido como La Cristalera, ha dejado de nuevo a la vista esta bonita estructura metálica, que algunos atribuyen a un discípulo del mismísimo Gustave Eiffel.

El antiguo tinglado portuario, que llevaba décadas regentado como bar de copas por la misma empresa concesionaria, cambió de manos el pasado mes de julio, cuando el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) acordó entregar la concesión a una nueva firma,  Puerto Copas, S.L.U.

El cambio de manos del negocio como local de hostelería se ha retrasado hasta ahora, cuando la antigua concesionaria ha desmantelado las dos terrazas que rodeaban la estructura, una delantera y otra trasera, así como las vallas que la rodeaban en buena parte, dejando a la vista después de muchos años la pérgola en todo su esplendor.

Otra imagen del antiguo tinglado portuario.

Los antiguos tinglados portuarios  eran construcciones utilizadas en los puertos como almacenes, naves o cobertizos de mercancías preparadas para embarcar, o bien de productos ya descargados. Existían  tinglados similares, de tipo modernista, en la zona portuaria de Sevilla o en el Puerto de Valencia (1911).

En el caso de El Puerto, la construcción de la pérgola se remonta al año 1922, siendo levantada en su día por decisión de Obras del Puerto.

En el año 2012 la APBC levantó un espacio expositivo en este enclave, que fue el primer muelle de carga de la ciudad. El espacio expositivo está presidido por una grúa manual de principios del siglo XX y delimitado por la antigua barandilla del cantil del muelle de piedra ostionera. Completan el conjunto una farola de la época, un noray y varios toneles de vino (que solía ser la carga tradicional en este muelle) que se erigen junto al antiguo tinglado.

La grúa de carga, los toneles y la barandilla fueron algunos de los elementos instalados en 2012.

Este espacio dedicado al patrimonio portuario fue una de las recomendaciones de la Consejería de Cultura al Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico, mediante la recuperación y catalogación de antiguos elementos relacionados con la actividad marítima y portuaria.

Los detalles de la nueva explotación se aprobarán en el Consejo de Administración de la APBC del mes de octubre, donde se aprobarán con detalle las condiciones, entre ellas el tiempo de la concesión.

El nuevo concesionario podrá ahora instalar el nuevo negocio en La Cristalera, mientras que la concesionaria saliente también prepara la apertura de un nuevo negocio en el entorno de la Bajamar.