Lucas Pérez se fue del Cádiz CF a mitad de la pasada 2022-23 con la misión de ayudar al Deportivo de La Coruña a salir del pozo de Primera Federación (antes Segunda B) y regresar al manto del fútbol profesional en la categoría de plata.

Antes de salir con destino a Galicia, el ariete jugó 31 partidos y marcó ocho goles con los amarillos entre la segunda parte de la campaña 2021-22 y la primera de la 2022-23. Fue una pieza importante en la consecución de aquella agónica permanencia y entró en la historia de la entidad cadista al ser el autor del gol de la primera victoria a domicilio (0-1) sobre el Barcelona.

Una vez en el conjunto gallego, el delantero firmó nueve tantos que a la postre fueron insuficientes para lograr el ascenso y Dépor recorre ahora su tercera campaña seguida en Primera Federación.

El objetivo del cuadro coruñés no es otro que volver lo antes posible a Segunda División, aunque este curso se está complicando la vida en exceso.

Y es que por primera vez en su historia, el Deportivo ocupa puestos de descenso a Segunda Federación, la cuarta categoría del fútbol español, después de sumar únicamente ocho puntos en las primeras ocho jornadas del grupo I de la Primera Federación.

Lucas Pérez ha participado en seis encuentros y aún no ha estrenado su cuenta anotadora. Está viviendo su peor momento desde que se fue del Cádiz CF y regresó al conjunto de su tierra.

El único equipo campeón de Liga que no milita en el fútbol profesional sigue sin levantar el vuelo, castigado por las lesiones de jugadores importantes en el sistema de juego de Imanol Idiakez y por una fragilidad impropia de un equipo que este verano se ha reforzado con jugadores con pasado en Primera División.

Un gol a noche del domingo del ex deportivista Miku en el tiempo de prolongación permitió al Arenteiro, un modesto club de O Carballiño (Ourense), tumbar al Sestao River y dormir fuera de la zona de descenso, a la que ha caído el Dépor pese a rescatar horas antes un punto frente a la Ponferrafida en El Toralín.

Campeón de Liga en el 2000 y de las Copas del Rey de 1995 y 2002, el conjunto deportivista es decimosexto en la clasificación con 8 puntos, cinco más que el colista Tarazona y a nueve del Nàstic, líder en solitario.

El próximo fin de semana el Deportivo volverá a jugar a domicilio contra el Sabadell, otro de los equipos que ha cerrado la octava jornada en descenso.

Ambos están separados por tan solo un punto, así que un nuevo tropiezo en la Nova Creu Alta podría costar el puesto al técnico Imanol Idiakez, una apuesta personal del nuevo director deportivo Fernando Soriano que, de momento, sigue teniendo la confianza de los dirigentes blanquiazules