El Cádiz CF no ha sumado los puntos que hubiese deseado en las tres primeras jornadas de Liga. Estuvo cerca de irse al parón con cinco, pero la derrota a última hora frente al Osasuna le deja con sólo dos de los nueve disputados fruto de un par de empates (ante el Levante y el Betis) y el varapalo frente a los navarros.

La escasa cosecha obliga al conjunto amarillo a elevar la producción en un mes de septiembre que se presenta bastante complicado. El interrogante es cuándo logrará su primer triunfo y cuál será su primera víctima.

El calendario se comprime de tal manera que el póquer compromisos que el Cádiz CF encara en el noveno mes del año queda acotado en un estrecho margen de dos semanas, con una media de un partido cada cuatro días entre los domingos 12 y 26.

El cuadro gaditano figura en la nómina de teóricos candidatos al descenso pero una vez más, como el pasado ejercicio 2020/21, está dispuesto a hacer añicos los pronósticos y abrazar la permanencia con la que caminar hacia la consolidación en la élite del fútbol español

La consecución del objetivo implica la obligación de la victoria. Difícil, pero no imposible, en los exámenes de septiembre.

El recorrido por la máxima categoría implica un continuo desafío para uno de los modestos que no va a negociar la lucha, como demuestra desde el principio. El Cádiz CF compite al máximo a falta del necesario impulso que otorga el triunfo para evitar verse en los puestos de la cola que no llegó a pisar la pasada campaña.

La primera tentativa es nada menos que contra la Real Sociedad el domingo 12 en Carranza (ahora estadio Nuevo Mirandilla). Una cita de calado ante un equipo vasco fue muy superior a los amarillos el último curso. Es la referencia más cercana entre los dos contrincantes.

El Cádiz CF perdió los dos partidos ante la Real: 0-1 en casa y 4-1 en San Sebastián. El equipo de Imanol Alguacil fue el mejor de los 19 que visitaron Carranza en el torneo 2020/21.

El empeño de los jugadores entrenados por Álvaro Cervera es revertir la situación y poder sumar puntos ahora ante un adversario de indiscutible potencial.

Cinco días después, el viernes 17 de septiembre, el Cádiz CF comparecerá en Balaídos (quinta jornada) para enfrentarse a un Celta de Vigo que ha empezado mal la temporada (un solo punto en su cuenta y ubicado en plaza de descenso).

Los gaditanos tratarán de plantar cara y no dar lugar al severo castigo que sufrieron en Galicia en diciembre de 2020, cuando cayeron 4-0 con todos los goles recibidos en la primera mitad.

Y después, en el sexto capítulo, que se desarrollará entre semana, el Cádiz CF recibirá al Barcelona el jueves 23 en uno de esos partidos con nada que perder y mucho que ganar, con el claro papel de favorito para los de Ronald Koeman.

Los de Cervera volverán a desafiar a la lógica, como hicieron el pasado, cuando ganaron 2-1 al gigante azulgrana. Si ya es difícil vencer al Barcelona, más aún dos veces seguidas.

El Cádiz CF cerrará el mes de septiembre con un desplazamiento a Madrid para medirse al Rayo Vallecano (séptima jornada de Liga). Una cita de alta relevancia al tratarse de un partido contra un rival directo en la dura contienda por la salvación. La continuidad en Primera División se pone en juego en este tipo de partidos.

Los amarillos intentarán dar un golpe de efecto en Vallecas, aunque si no logran la victoria será importante que no regresen con una derrota que complicaría el trayecto.