Los Depósitos de Tabaco de Cádiz, un lugar para estar y trabajar, se presenta a sus barrios

“Un niño, un profesor, un libro y una pluma pueden cambiar al mundo. La educación es la única solución". La reflexión de la activista Malala Yousafzai, premio Nobel de Paz, recibe a todo aquel se asoma, entre la curiosidad y el asombro, a la nave 1 de los antiguos Depósitos de Tabaco, cuya primera fase de rehabilitación se ha presentado estos días 29 y 30 de julio a la ciudadanía, a los barrios, que deben hacerlos suyo.

La leyenda de la joven paquistaní que conmocionó al mundo, pero también las palabras de nuestra querida Gloria Fuertes o del icono para generaciones de lectores jóvenes J. K. Rowling, resuenan en las paredes de un espacio de 3.400 cuadrados de uso útil -tan útil como hay cabida para la actividad cultural, de emprendimiento y social- que junto al espacio de entrevías, la entrada al complejo y una pequeña parte de la nave 5 -en total más de 5.000 metros- protagonizan esta primera parte de una intervención que ha recorrido "tres gobiernos municipales diferentes", una imprescindible "colaboración entre administraciones" y una mirada decidida a que "cada metro cuadrado en una ciudad como Cádiz, cuenta, no podemos dejarlos en desuso".

Así lo han expresado el alcalde de Cádiz, Bruno García, y la subdelegada del Gobierno, Blanca Flores, momentos antes de que los representantes de colectivos vecinales y sociales y, posteriormente, cualquier ciudadano, conocieran de primera mano el resultado de una intervención que comienza a cambiarle el rostro a uno de los edificios símbolo de la, ya perdida, industria tabaquera en nuestra ciudad y que ahora se quiere erigir como el revulsivo necesario que dinamice la vida de barrios tan populares como los vecinos Loreto y Cerro del Moro. Hacer futuro desde el pasado, como se vino a decir en aquellas otras jornadas de puertas abiertas del año 2022 en las que se quiso presentar este proyecto también a la ciudadanía.

Un lugar para estar y para trabajar, para el ocio y para el emprendimiento, para expandir y para unir. Eso, sí, será el ciudadano el que tenga la última palabra sobre el uso real de un proyecto que en esta primera fase, esta primera nave, nos invita a pasar la jornada entre los libros de su biblioteca -que pasará a formar parte de la red pública municipal-, en su ludoteca y en sus diferentes y variados espacios para trabajar, destinados al coworking o incluso en sus habitáculos para reuniones y formación. Espacios a los que se accederá de manera libre, sin pasar por un procedimiento de selección. "La idea es que las personas lleguen y lo hagan suyo", vienen a decir los responsables municipales.

Una circulación abierta que, eso sí, tiene dos excepciones, el espacio reservado para la Agencia Digital de Andalucía (ADA) y para el programa social Eracis, éste último, destinatario de la parte que ya se ha rehabilitado de la contigua nave 5 y que, por ahora, queda un poco más apartado del esperado ajetreo de la vida diaria que tendrá el almacén vecino.

Y es que en la nave 1 se avecina, y se desea, una convivencia armónica, hasta en el nivel de ruido -se han colocado paneles bastante efectivos para absorber los sonidos-. Así lo exige un enorme espacio que se plantea -dos arquitectos municipales han trabajado en darle forma- en diferentes habitáculos dispuestos en la alargada nave de techo inalcanzable -11,40 metros en su punto más alto- que permite la construcción a dos alturas. Una propuesta estéticamente inspirada en el estilo industrial, pero confortable, de las culturas nórdicas, que, de alguna manera, tampoco oculta el pasado del edificio como factoría.

"De hecho, para la inauguración tenemos prevista una exposición sobre la transformación de estos Depósitos de Tabaco, sobre cómo ha sido y el camino seguido hasta esta nueva vida. Además, en el futuro habrá algún tipo de recuerdo permanente de la historia del edificio", adelanta el alcalde Cádiz sobre un hito que sucederá "a finales del mes de septiembre". Y es que, aunque esta primera fase está concluida, "hasta lo que no está puesto del mobiliario lo tenemos ahí custodiado en la nave 5", queda por cerrar la mudanza de ADA y Eracis "que implica traslado de personal y de actividad" con lo que se valora que el inicio del curso es la fecha idónea para que el espacio social, cultural y de emprendimiento que será los Depósitos de Tabaco abra sus puertas.

Asimismo, en el espacio entrevías -ya desaparecida las antiguas vías y salvado el nivel de terreno entre una y otra orilla de puertas- se presenta como otra oportunidad para la actividad de ocio y cultura. "No descartamos que se celebre, puntualmente, algún tipo de espectáculo. Es más, estoy seguro que cada gaditano que nos visite estos días tendrá sus propias ideas sobre qué deberíamos hacer tanto dentro del almacén como en este espacio de entrevías, pero creo que primero tenemos que arrancar respetando la esencia del espacio, que es la de punto de encuentro porque, recordemos, será la nave 2, contemplada en la segunda fase de rehabilitación, la que estará destinada a la celebración de espectáculos culturales", precisa Bruno García en este espacio sobrevolado por una característica arcada de acero que, de hecho, fue la primera parte de los Depósitos de Tabaco que volvió a la vida con los espectáculos del Festival Iberoamericano de Teatro en 2020 y, el pasado año, con la Batalla de Gallos de Red Bull. "Sí, pero todavía estaba esto con las antiguas vías", se recordaba en la visita institucional.

También, de cara a su inauguración oficial, se tiene previsto instalar un espacio de foodtrucks en la zona ajardinada de la entrada mientras que la cafetería de los Depósitos de Tabaco, incluida en la segunda fase, se pondrá en marcha todavía vez concluidos los trabajos.

Un espacio y una puesta valor con mucha historia

Los Depósitos de Tabacos de Cádiz se inauguraron en 1913 erigiéndose como un importante avance en la industrialización de la ciudad que se convirtió en una de las dos localidades de España (la otra, Santander) en acoger una infraestructura de este tipo. Pero esta actividad, símbolo también de la lucha obrera de la ciudad -las incansables y guerreras cigarreras- fue decayendo poco a poco, como ha ido decayendo toda la gran industria de la capital, durante la primera década del siglo XXI cuando se hace efectivo su cierre tras la, casi, testimonial vida laboral de sus últimos años.

Fue durante el gobierno de Teófila Martínez cuando la ciudad adquirió la propiedad de este complejo que, en principio, se ideó como un gran proyecto cultural referente para toda la Bahía. Sin embargo, no se llegó a mover ni a poner en marcha y fue el siguiente regidor de la ciudad, José María González Kichi, el que reactivó y ejecutó la idea consiguiendo jugosos fondos europeos. Eso sí, el proyecto era menos ambicioso. Al cederle a la Junta de Andalucía dos naves para la construcción de la Ciudad de la Justicia -que todavía está a la espera- el Consistorio se quedaba con tres naves -los almacenes 1, 2 y 5-.

Tampoco ha sido un camino de rosas la rehabilitación de los antiguos Depósitos de Tabaco. Y es que los fondos Edusi no alcanzaron para acometer económicamente la rehabilitación -problemas estructurales en los techos incrementaron los costes y retrasaron la ejecución de las obras- que se tuvo que complementar con fondos propios y con otra manita de Europa, los Next Generation.

El gobierno municipal actual recogió el testigo de este "proyecto de ciudad", como lo ha definido Bruno García, que se ha encargado de darle continuidad a la primera fase de rehabilitación y licitar la segunda, la que contempla la reforma del resto de la nave 5 y la nave 2, que ya está en marcha con los conseguidos fondos del PIREP que marcan marzo 2026 como fecha de fin de los trabajos.

Además, a los actuales responsables también les toca definir su uso y dinamización que, adelantan, se coordinará desde la delegación de Fomento, aunque cada delegación será responsable de cada uno de los tres grandes bloques -emprendimiento (Fomento), cultura (Cultura) y social (Asuntos Sociales)- en los que se divide la actividad de la nueva vida de los Depósitos de Tabaco.

Una nueva vida que, recordemos, se compatibilizará con el proyecto Ciudad de la Justicia (que ocupa dos de las naves) y la construcción de dos bloques de vivienda, una de renta libre y otra de VPO.