No hace falta decir que hay pacto o no. Basta con ver algunas señales que apuntan a que tendremos alcalde y no alcaldesa mañana. Una de ellas es que la reunión del PSOE con el Partido Popular el miércoles duró apenas 50 minutos y no se vio ningún atisbo de acercamiento. La que se produjo ayer entre los socialistas y Por Cádiz sí se Puede en la sede de la Asociación de Vecinos de Puntales se prolongó durante dos horas y media. Tras ese tiempo, José María González 'Kichi' salió muy satisfecho del encuentro porque, a su juicio, "se han cumplido las expectativas con creces". Más moderado fue en su impresión el secretario local del PSOE, Fran González, que insistió en que quería un cambio en la ciudad pero "un cambio que sea creíble. En eso estamos, en la búsqueda de un cambio que tenga garantías".

Una decisión que el PSOE iba a tomar en cuestión de horas, "porque no es cuestión de llevarla al extremo de aguantarla hasta el sábado", que es el día fijado para la investidura y porque estaba pendiente también de la Junta Ejecutiva del PSOE que se celebró en la tarde de ayer.

En la misma González informó de los dos encuentros que había tenido en el plazo de los dos últimos días y se dejó entrever que la vía del Partido Popular era la más complicada, por lo que se dejaba abierta la de Podemos, pese a las reticencias que siempre ha tenido entre las filas socialistas un pacto con ellos.

Tras esta ejecutiva, tal y como apuntó un portavoz del PSOE, se iba a seguir negociando con Por Cádiz sí se Puede todo el tiempo que hiciera falta por la noche hasta alcanzar un acuerdo en los dos temas principales que ya se trataron por la mañana: la inclusión de los cuatro ejes de propuestas del PSOE (plan de empleo municipal, plan de fomento de alquiler de la vivienda, la protección social y la transparencia) en el programa de gobierno de Podemos y que éste aclare de manera económica y jurídica la viabilidad de las suyas, como por ejemplo la remunicipalización.

De este modo, para las nueve de la mañana de hoy Fran González ha convocado una nueva Ejecutiva Local donde se informará de las negociaciones de última hora y donde se supone que ya habrá fumata blanca.

Fue un encuentro que acabó bastante mejor de como empezó, donde hubo prácticamente que insistirle a Fran González que estrechara la mano de José María González y donde el primero soltó un puyazo ("aquí venimos al purgatorio", dijo) en referencia a lo que manifestó el día anterior en la asamblea de Podemos el parlamentario Jesús Rodríguez acerca de que no iban a formar gobierno con el PSOE y que esta formación iba a estar todo este tiempo en el purgatorio. Sin embargo, a lo largo de esas dos horas y medias hubo un intercambio de propuestas y de preguntas de uno y otro bando para salir con buenas perspectivas para que José María González se convierta en el tercer alcalde de la actual democracia en la ciudad. Kichi acudió acompañado precisamente de Jesús Rodríguez y de Luis Babiano. Por su parte, el clan de los González era el trío que presentó el PSOE: Fran González; el presidente local del partido, Manuel González Piñero, y su secretaria de Organización, Pilar González.

Eso sí, Fran González se encargó de recalcar que "en absoluto" se había cerrado un acuerdo o pactos: "Hemos tenido un acercamiento, hemos entrado de lleno en temas sustanciales e importantísimos para los gaditanos" pero aún consideraba que era pronto para poder decir que el voto de sus cinco concejales podría permitir la elección de José María González.

Fue una reunión donde se hizo un diagnóstico de la ciudad, "en la que ambos coincidimos que es catastrófica tras la gestión y el gobierno del PP", pero también para pedirle el voto para la investidura y para aclararle diversos puntos de su programa en los que el PSOE tenía y tiene serias dudas sobre la legalidad o la viabilidad económica de algunas propuestas, entre los que citó el plan de vivienda, la remunicipalización, la gestión de la deuda municipal y el pago a proveedores.

El primero de ellos es el más espinoso porque los socialistas quieren saber qué servicios son los que se van a remunicipalizar, en base a qué normativa, teniendo en cuenta el Plan de Ajuste y la situación económica del ayuntamiento, qué coste va a suponer y en cuanto tiempo se va a llevar a cabo esta remunicipalización.

También hubo propuestas en sentido contrario, es decir, del PSOE a Por Cádiz sí se Puede, que el líder de esta formación señaló que "la inmensa mayoría" de ellas "son asumibles" por la agrupación de electores: "Hay ideas que están muy bien, como el plan de empleo municipal, el de fomento del alquiler y las propuestas de reestructuración de los servicios sociales, que también se reflejan en nuestros planteamientos programáticos".

¿Está dispuesto Podemos a renunciar a algunas de sus propuestas? El alcaldable de esta formación afirmó que no se trata tanto de que dejen de lado algunas medidas de su programa como incorporar las del PSOE y Ganar Cádiz en Común, "fuerzas con las que se puede plantear un gobierno de cambio en la ciudad". Eso sí, ante las dudas que despierta las suyas en las filas del PSOE defendió que cuando las han incluido entre sus propuestas electorales es "porque son perfectamente asumibles y realizables".

Si no se llegara a un acuerdo, Fran González advirtió ayer una vez más que se votarían a sí mismos y, por lo tanto, se permitiría la renovación del Gobierno de Teófila Martínez al ser la lista más votada.

José María González se refirió ayer a que no se ha hablado en ningún momento de entrar a formar parte del Gobierno, circunstancia que sí se puede dar con Ganar Cádiz en Común si lo aprueba en su asamblea Podemos. Kichi recalcó que en la reunión lo que se trató es de "lealtades entre grupos políticos y también entre administraciones".

El alcaldable demostró estar "muy ilusionado" por "liderar este proceso de cambio" en la ciudad y se mostró satisfecho porque "hoy hemos cumplido las expectativas de buena parte de nuestros vecinos, que nos pedían que nos encontráramos dentro del marco de entendimiento y del diálogo".

Con respecto al tema personal y si el PSOE le ha echado en cara su actitud tras el 24-M, José María González dijo que "ha sido una reunión larga, que ha tenido distintas fases y como con cualquier conversación con una persona, a mí me gusta decirle lo que me gusta y lo que no me gusta. Es muy sano decirnos las cosas a la cara".