Dos cuestiones de la gestión municipal han sido ya elevadas de manera directa al Tribunal de Cuentas para que analice la situación que se viene repitiendo. De hecho, el organismo ya está analizando la situación relacionada con el servicio de limpieza, habiéndose puesto también en su conocimiento el problema que se viene arrastrando con los continuos reparos a facturas que emite el área de Intervención y que ya supera los catorce millones de euros.

El Tribunal ha puesto en conocimiento del Ayuntamiento que está tramitando la denuncia puesta en su conocimiento en relación al contrato de limpieza y recogida de basuras de la ciudad. Según la información que ha sido trasladada al Tribunal de Cuentas, el contrato expiró el 31 de julio de 2016 y fue prorrogado por un año, que luego se prolongó otro más hasta el 31 de julio de 2018. Desde entonces se encuentra el servicio en una situación de carácter extraordinaria que el pleno del Ayuntamiento se dio por un plazo máximo de un año y hasta que no se adjudique el nuevo contrato. Esta situación se une al desgaste de la maquinaria y de los vehículos (que cuentan ya con doce años de vida) y a los reparos que venía emitiendo Intervención, que llegó incluso a anunciar a finales del pasado año que no permitiría el pago de nuevas facturas a la empresa –cuestión que finalmente se descartó después de aprobarse la estructura de costes y salir la misma a información pública en los boletines de la Diputación, la Junta y el Estado–.

Precisamente esta cuestión de los reparos anunciados por Intervención para el pago de las facturas de Sufi Cointer ha motivado que el asunto relacionado con este servicio llegue a manos del Tribunal de Cuentas, que ya ha anunciado que ha procedido “a dar su oportuna tramitación” al caso, agravado por la ausencia de convocatorias de la comisión técnico–política creada para analizar este servicio, y que en diversas ocasiones ha solicitado la oposición.

Precisamente, en relación a los reparos también ha sido ya informado el Tribunal de Cuentas de la situación que se viene dando en el Ayuntamiento, donde Intervención no acepta el abono de facturas que suman ya –desde enero de 2018 al 18 de febrero– más de catorce millones de euros. Muchas de ellas sí se están pagando finalmente por medio de decretos que firma el alcalde de la ciudad, José María González.De algún modo, por tanto, se unen ambas causas que ya han llegado a manos del Tribunal de Cuentas y cuya tramitación y análisis ya ha comenzado, como de hecho ha solicitado en alguna ocasión la oposición en sus denuncias por la gravedad que otorgan a estos hechos.

Ante esta realidad, el alcalde ya ha manifestado en diversas ocasiones que todo lo realizado en este asunto cumple con los preceptos legales y que el levantamiento de reparos es una figura perfectamente establecida, por lo que ha restado importancia a las críticas vertidas por la oposición por estos más de 14 millones de euros reparados por el área de Intervención, en la mayoría de ocasiones por servicios que se siguen prestando después de que finalizara el contrato y sin que el área de Contratación haya realizado el procedimiento para sacar a concurso un nuevo pliego.