Dentro del expediente sobre la labor de reparo que Intervención ha llevado a cabo en los últimos meses (de enero a agosto de este año) hay dos servicios que copan el mayor número de actuaciones: la guardería y las notificaciones por correo. Juntos suman hasta 27 expedientes de reparo de la Intervención.

17 de esos expedientes están relacionados con los proveedores que atienden el centro de educación infantil de la calle San Juan de Dios. El grueso principal está relacionado con las provisiones de alimentos: fruta y verduras, productos congelados o pan, básicamente; y a ello se suma el servicio de lavandería o el material de limpieza. Pequeños contratos, en definitiva, que además se vienen firmando de manera repetida con proveedores que son pequeños o medianos empresarios y cuyo pago se ha retrasado.

Esta situación ya originó cierta polémica el pasado mes de mayo, cuando uno de los proveedores de la guardería –Maribel Gené, que suministraba fruta y verdura– rompió relaciones por una deuda que ascendía hasta los alrededor de 7.800 euros.

La polémica entonces se apagó con el anuncio por parte del Ayuntamiento de que se habían firmado ya los correspondientes decretos de abono de esas facturas que estaban paralizadas en Intervención, trasladando la normalidad que ello conllevaría y anunciando que ya existían pliegos para la contratación de estos servicios.

Medio año después, la realidad es que los contratos siguen sin salir a concurso público, y los decretos que en mayo se cuantificaron en seis ya suman 17, con un montante total de 54.150,04 euros. En todos los casos, conviene reseñar, el decreto de levantamiento del reparo ha liberado las partidas económicas para que se abonen esas facturas pendientes a los proveedores; siendo llamativo que la mayoría de decretos vienen firmados por el director técnico del área de Asuntos Sociales y no directamente por el alcalde (que es quien a priori tiene la potestad de levantar el reparo de Intervención).

Eso sí, estos expedientes se refieren a facturas que llegan, en el caso más cercano, a julio de este año; lo que hace pensar que desde el inicio de curso se hayan producido otra serie de facturas que aún no se han resuelto.

En el caso del servicio de correo y mensajería, las facturas con reparos de Intervención hasta el pasado mes de octubre suman 871.055,02 euros. Tal cantidad deriva de una decena de expedientes que hacen referencia a la gestión de diversas áreas municipales (Régimen Interior, Tesorería, Tráfico o Gestión Tributaria, que son aquellas cuyo desempeño diario necesita el envío de notificaciones) que han dado como resultado multitud de facturas.

En todos los casos, el reparo de Intervención se debe a la ausencia de contrato en vigor para este servicio, habiendo levantado el alcalde una mínima parte de ese importe total. En concreto, José María González ha firmado decretos que suman 260.457,60 euros, por lo que la deuda con Correos aún se eleva a 610.597,42 euros, además de lo que a partir del mes de julio se haya podido generar (en principio poca cantidad ya que Correos suspendió el servicio al Ayuntamiento precisamente por este impago).