Los veladores de la plaza del Rey de San Fernando satisfacen a hosteleros y clientes

Desde hace varios días las terrazas de los establecimientos hosteleros de la céntrica plaza del Rey lucen un aspecto imponente, con su veladores ya instalados y ofreciendo una estampa uniforme. Aún queda pendiente la iluminación propia de estos equipamientos, pero el grueso de sus elementos ya forman parte del paisaje urbano de la plaza y de la rutina diaria de estos tres negocios: Los históricos La Gran Vía y El 44 y el reciente La Esquina del Rey.

Los primeros que han recibido estos cambios con agrado son los clientes que frecuentan estos bares, que han ganado en comodidad y confort. De hecho, los toldos dobles verdes que cuelgan de las columnas ornamentales instaladas ofrecen amplias zonas de sombra que agradecen los parroquianos en estos días en los que el calor ya aprieta. Así lo explican los trabajadores y los gerentes de estos establecimientos.

El gerente de La Gran Vía, Antonio Alba, se suma a estas buenas sensaciones y asegura que la prueba de fuego para estos equipamientos vendrá con los días de lluvia y de Levante, cuando los paravientos móviles tendrán que demostrar su utilidad. “Estamos seguros de que los clientes lo van a notar para bien y que se van a sentir mucho más resguardados en caso de lluvia y viento. Además, poder mover estos elementos según las necesidades del momento nos facilita mucho la labor. En definitiva, creemos que los veladores van a mejorar la experiencia del cliente”, indica Alba.

Por su parte, Manuel Expósito, gerente de El 44 destaca, entre otras virtudes, la calidad de los materiales de estos veladores y su funcionalidad. “La verdad es que la clientela está encantada y eso se escucha en los comentarios y conversaciones de la terraza”, señala Expósito.

Por otro lado, el propietario de La Esquina del Rey, Antonio Fernández, subraya la mejora estética que ha supuesto los nuevos veladores. “Se ha ganado enteros. La imagen que ofrecen las terrazas es ahora mucho más cuidada y homogénea. Ahora, con estas últimas mejoras, la plaza del Rey se ve vestida como se merece”, detalla el hostelero.

Hay que recordar que la instalación de esta media docena de veladores, cuyo estilo ha buscado inspiración en los de la madrileña plaza de Oriente, ha costado más de 320.000 euros.

Las estructuras, en la que priman los colores verdes, dorados y grises, también se inspiran en elementos propios de la arquitectura típica de San Fernando, como las almenas. Estos elementos nacen de un compromiso adquirido por el gobierno municipal con los hosteleros de la zona.

En un principio el número de veladores iba a ser ocho, pero se redujo a una media docena siguiendo de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico.

Entre retrasos e incertidumbre

Pero no todo son luces en este esperado estreno, de hecho los hosteleros más veteranos este espacio explican cómo les ha afectado el retraso que ha experimentado la instalación de estos veladores, que llegan dos años después de que se inaugurase la remodelada plaza del Rey. Una remodelación, que, por otro lado, también se hizo de rogar, con unas obras que superaron de largo el plazo inicial previsto, de seis meses, para desarrollarse durante 15.

De esta forma, estos hosteleros ven ahora el fin de su particular travesía en el desierto, tras años muy difíciles en los que han ido encadenando las restricciones de la pandemia y los retrasos de las obras de la remodelación de la plaza del Rey y de los veladores.

El contrato de los veladores quedó desierto en febrero de 2023 y hubo que volver a licitarlo en julio de 2024, adjudicándose el pasado mes de octubre a la empresa catalana Yter Nexus SL.

Mientras los veladores no se hacían realidad hay hosteleros que realizaron inversiones para dotar de elementos adecuados a a sus terrazas que permitiesen proteger del sol a sus clientes, material que ahora queda sin uso y almacenado.

Por otro lado, los hosteleros de la plaza del Rey muestran su incertidumbre sobre como quedará finalmente la distribución de sus terrazas, algo que ocupa en estos momentos a los técnicos municipales. A día de hoy estos profesionales desconocen cuáles serán los límites de sus terrazas y el numero de mesas que permanecerá.