Renfe sólo ha reformado la mitad de los Alvia, lo que dificulta mejorar y ampliar el servicio de tren en Cádiz

La tormenta perfecta en la que se encuentra inmersa el sistema ferroviario español, tiene en la provincia de Cádiz uno de sus epicentros.

A pesar de ser una de las zonas con mayor número de pasajeros y, con ello, una de las más rentables para Renfe, Cádiz soporta importantes déficit en este servicio desde hace ya unos años. Todo cuando poco a poco se está incrementando la red de Alta Velocidad en buena parte de España, de la que Cádiz queda siempre desligada y sin perspectivas de incluirse en ella por el coste multimillonario que tendría acometer esta obra.

Esta última situación, además, afecta a la llegada a nuestra provincia de la competencia de Renfe, como son Ougio e Iryo, que ya funcionan en otros corredores. Aquí habrá que esperar a septiembre cuando Adif inicie el proceso de liberalización de los trayectos entre Madrid-Galicia, Madrid-Asturias-Cantabria y Madrid-Cádiz- Huelva. A partir de esta fecha las nuevas empresas podrán optar o no a entrar en estos recorridos, un paso que, en todo caso, no se haría de forma inmediata.

Más allá de esta situación, la normalización del tren en Cádiz, tanto en la Bahía como, especialmente, en el Campo de Gibraltar, se ve afectada en estos años por la falta de trenes suficientes para cubrir con garantía todos los servicios ya establecidos.

El Ministerio de Transporte ha acumulado años sin modernizar su flota. En 2016 realizó un contrato millonario con Talgo para la adquisición de nuevos trenes, entre ellos los Avril (más potentes y rápidos que los Alvia, que cubren la Larga Distancia en Cádiz). Igualmente se aprobaron contratos para la compra de unidades de Media Distancia y de Cercanías.

Este importante plan de modernización se ha topado con los problemas de las empresas contratadas, especialmente Talgo, para tener los encargos en tiempo y forma pues algunas unidades del Avril ya en uso han dado problemas en sus primeros meses de funcionamiento.

Así, el retraso de la llegada de nuevas unidades trastoca el funcionamiento de muchas de las líneas, y más cuando han entrado en funcionamiento algunas nuevas en Alta Velocidad en toda la zona norte.

Pero hay más, y aquí la incidencia afecta más a los usuarios gaditanos.

El paso por mantenimiento y renovación de las 30 unidades que se tienen de los Alvia también ha incumplido el calendario previsto. Hasta ahora apenas hay una docena de estos trenes ya reformados en servicio. El resto sigue en uso pero con numerosas averías, como constatan casi a diario los usuarios.

El tiempo que los Alvia deben pasar en los talleres para su modernización o por las averías resta, a su vez, el número de los que están plenamente en activo.

Hay que tener en cuenta que de estos 30 Alvia de la flota de Renfe, 14 están asignados al Corredor Mediterráneo (donde están la mayor parte de las unidades ya reformadas), a la línea Barcelona-Salamanca y al Torre del Oro que va de la Ciudad Condal a Cádiz en uno de los trayectos más largos de toda la red. Quedan así apenas 16 unidades que se destinan a Asturias, Cádiz y otras zonas del país. Este número resulta insuficiente para ampliar los viajes hasta cinco o seis trayectos por sentido, entre Cádiz y Madrid, como pasó hace ya unos años en la temporada estival. Ahora se pasará a cuatro por sentido desde final de junio y hasta principios de septiembre durante toda la semana y de manera muy excepcional.

En un futuro Cádiz podría contar con los Avril, preparados para el paso por la red ferroviaria que nos une con Sevilla, pero hasta ahora estos nuevos trenes se concentran fundamentalmente en el norte del país y en el Corredor Mediterráneo, además de ir destinados a las nuevas líneas de Alta Velocidad que van a ir entrando en funcionamiento a medio plazo.

Pero la tormenta ferroviaria no se concentra únicamente en los viajes a Madrid. También hay problemas con la Media Distancia.

Por lo pronto, la falta de billetes en determinados días de la semana, a lo que no ayuda la rebaja del billete que se ha mantenido hasta ahora. Hay jornadas que es imposible encontrar asiento para ir a Sevilla o Córdoba (o la vuelta), si se pretende comprar a escasas horas del inicio del viaje.

Como con los Alvia, aquí se choca también con la falta de unidades, lo que imposibilita poner dobles composiciones que sí se activan en fechas como Carnaval o Semana Santa.

A la vez a los trenes serie 449, que cubren estos recorridos también les toca pasar la revisión de media vida, con el problema de que no hay suficientes para reemplazar a los que estén en talleres, junto al retraso en la entrega de los nuevos Media Distancia.