Los embalses gaditanos han perdido 48 hectómetros cúbicos durante el último mes

El sistema lleva ya nueve semanas consecutivas de bajada, aunque aún supera su media histórica

Los embalses gaditanos pierden agua por primera vez desde enero

El embalse de Guadalcacín llena el 45% de sus 800 hectómetros cúbicos.
El embalse de Guadalcacín llena el 45% de sus 800 hectómetros cúbicos. / Europa Press

Los embalses del sistema Guadalete-Barbate, de los que depende la mayor parte de la provincia, han perdido durante el último mes un total de 48 hectómetros –el equivalente, por ejemplo, al pantano de Celemín–. Una bajada que hace que sean ya nueve semanas las que la red de embalses lleva en descenso, tras los meses de recuperación que supusieron marzo y abril. Estas últimas semanas son –además de unas de las de mayor consumo–, las de mayor insolación de año y, por tanto, las de mayor evaporación. Aun así, la reserva en los pantanos gaditanos sigue estando por encima de su media histórica en los últimos diez años. Según los datos semanales que recoge el MITECO, los embalses de la provincia se colocaron durante la pasada semana al 49,8% del su capacidad, rozando la mitad de su total con un acumulado de 823 hm3; mientras que la media de la última década se coloca en el 47,6% (786 hm3).

La diferencia salta cuando –a pesar de la pérdida del inicio del verano– se compara el porcentaje con el que había acumulado en la misma semana del verano pasado, en plena sequía: un 25,3%, arrojando los pantanos de la red 438 hm3. Curiosamente, el embalse de Almodóvar se encuentra hoy al mismo nivel que en la segunda semana de julio en 2024, llenando cuatro de sus seis hectómetros (66,7%).

El de Los Hurones, por su parte, es el único pantano de la provincia cuya reserva tenía a la misma fecha de 2024 un mayor porcentaje. Así, el embalse de San José del Valle ha perdido un par de hectómetros en la última semana, colocándose en 361 hm3 y al 78,5% de su capacidad:hace doce meses, sin embargo, llegaba al 82,2%, con 111 hm3.

De forma detallada, en el resto del sistema, la reserva de Arcos ha sumado un hectómetro la última semana, con lo que está completamente llena.

En Barbate, se han perdido un par de hectómetros estos días, con lo el acumulado se coloca en un 46,4% del total, llenando 106 hm3 –frente al 17% (39 hm3)del año anterior–.

El salto es también considerable en el pantano de Celemín, al 62, 2% de su capacidad con 28 hm3, uno menos que en el anterior registro (en 2024, ese porcentaje era del 22,2%, suponía casi dos tercios menos que el actual).

BORNOS, MÁS DEL DOBLE QUE EN 2024

El embalse de Bornos, por su parte, supera también la mitad de su reserva llegando a los 141 hectómetros cúbicos, descendiendo un par desde la semana pasada, lo que supone un 70,5% de su total, más del doble de lo que tenía el año pasado, cuando se situaba al 32,5% con 65 hm3.

Los 800 hectómetros cúbicos del embalse de Guadalcacín están al 45,1% tras haber perdido otros tres hectómetros en los últimos siete días. Una cifra también muy distinta de la de 2024, cuando no llegaba ni a la mitad de la actual, con 161 hm3 y un a un 20% de su reserva.

Por último, el embalse de Zahara-El Gastor sigue siendo el único de la provincia en el que su porcentaje de reserva hídrica se encuentra entre el 25 y el 40%, estando al 28,2% al inicio de la canícula veraniega. De este modo, la balsa acumula 63 de sus 223 hectómetros: uno menos que la semana pasada, aunque suponga casi el doble que el exiguo porcentaje que arrojaba hace doce meses (un 15,7%, llenando 35 hm3).

En total, a nivel andaluz, los embalses han perdido 116 hectómetros cúbicos en una semana, y descienden un punto, hasta el 53,8%. No obstante, las reservas andaluzas todavía superan en 15,2 puntos el porcentaje registrado a esta altura de 2024, cuando se encontraban con 4.276 hectómetros cúbicos y al 38,6% de su total, y continúan por encima la media de la década.

En concreto, se sitúan 748 hm3 sobre el conjunto del periodo, con una media de 5.211 hm3 y al 47 por ciento de su capacidad. Una semana más, todas las demarcaciones vuelven a encontrarse por encima de los valores medios de la última década.

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