Provincia de Cádiz

CCOO y UGT prenden la mecha de una "ofensiva sindical" contra la patronal "irresponsable"

  • Carbonero y Pastrana llaman en Cádiz a más de 5.000 delegados sindicales a alentar movilizaciones frente a las "operaciones de castigo" contra los trabajadores

Mil parados por día. A esa velocidad calculan los sindicatos que está golpeando la crisis a los trabajadores andaluces. Ya son nada menos que 774.198. Ante esta escalada imparable, hasta el mismísimo obispo de Cádiz y Ceuta se ha visto en la obligación de llamar públicamente a los "empresarios cristianos y de buena voluntad" a "recortar sus ganancias económicas en favor de mantener los puestos de trabajo, evitando los despidos". Ayer, después del último parte de bajas laborales en la provincia -3.253 parados más sólo en el último mes y ya son 154.524-, los secretarios generales andaluces de los sindicatos mayoritarios en Cádiz se pronunciaron de manera más drástica y contundente ante estas cifras "escalofriantes". Son fruto, dijeron, de la "ofensiva empresarial que, con la excusa de la crisis, intenta arrebatar el empleo y los derechos más elementales de los trabajadores". Y criticaron a los empresarios andaluces, "porque, ante la crisis, lo único que están haciendo es despedir a trabajadores y luego pedir dinero a las administraciones públicas, después de haber puesto a salvo sus beneficios de los últimos años".

Francisco Carbonero, máximo responsable de Comisiones Obreras (CCOO) en la comunidad autónoma, y Manuel Pastrana, su homólogo de la Unión General de Trabajadores (UGT), llamaron a los 5.000 delegados sindicales de ambas centrales en la provincia a respaldar y promover "una ofensiva sindical contra este tipo de pretensiones". Lo hicieron acompañados de los secretarios provinciales -Manuel Ruiz y Pedro Custodio González, respectivamente- durante una asamblea que se celebró en el Palacio de Congresos de Cádiz y que superó con creces las previsiones de convocatoria y el aforo del auditorio. Luego, pasadas las 13:00 horas, más de un millar de delegados se manifestaron por las Cuesta de Las Calesas, con ellos en cabeza, y se concentraron frente a la Subdelegación del Gobierno en Cádiz, donde les recibió su secretario, en ausencia de Sebastián Saucedo.

Fue el acto central de la campaña de acción sindical conjunta En defensa del empleo y la protección social que viene desarrollándose in crescendo desde hace meses y que tendrá como punto y seguido el próximo Primero de Mayo. Tras las manifestaciones ya celebradas en las principales ciudades gaditanas y andaluzas, las próximas convocatorias son el 14 de marzo, en defensa de la inclusión de los trabajadores del campo en el Régimen General de la Seguridad Social; el 22 de abril, con una asamblea andaluza de delegados en Sevilla, y el 15 de mayo, con una macromanifestación en Madrid. Convocada por la Confederación Europea de Sindicatos, tendrá su reflejo en varias capitales de la UE.

A partir del 1 de Mayo, el abanico de posibilidades no puede estar más abierto. Los sindicatos adelantan que decidirán en función de la coyuntura y aseguran que no descartan "ningún tipo de movilización". De hecho, durante la asamblea y la concentración fueron varios grupos los que clamaron por una huelga general o los que corearon consignas del tipo Si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra.

"No vamos a admitir que los trabajadores sigan pagando esta crisis de la que no tienen culpa sus salarios, ni los costes de los convenios colectivos ni de sus propios despidos. Tampoco consentiremos que los Gobiernos acepten ninguna de las medidas que de manera irresponsable está pidiendo la patronal contra una crisis cuyo primer responsable es el sistema financiero internacional", dijo Manuel Pastrana. "Si la patronal sigue en su ofensiva contra los trabajadores, se encontrarán con una oposición de gran calado. Y si los Gobiernos se desvían aceptando sus planteamientos, también nos encontrarán de frente", añadió.

A continuación, Francisco Carbonero desgranó los tres obejtivos de la campaña. Primero, la defensa del empleo, "en todos los sectores, pero sobre todo en los más castigados, como el de servicios y el de la construcción", y entre los colectivos "más vulnerables, como las mujeres, los jóvenes y los inmigrantes". Segundo, el mantenimiento y la ampliación de la protección social para quienes ya perdieron su empleo y sus familias. "Esto hay que defenderlo desde el diálogo social y no en los mítines de fin de semana", dijo. En este punto abogó por el incremento de la prestación por desempleo contributivo y del subsidio y la eliminación del mes de carencia entre ambos. Y tercero, el cambio de modelo productivo, "porque la crisis nos ha cogido en el peor de los escenarios posibles", hacia otro industrial más competitivo y capaz de generar valor añadido.

En la línea de su colega, Carbonero llamó a los empresarios a ejercer "una mayor responsabilidad social y moral ante la sociedad andaluza, porque han estado capitalizando y patrimonializando sus beneficios en vez de invertir en el mantenimiento de sus empresas y de los puestos de trabajo. Están despidiendo a mansalva, escudándose en el burladero de la crisis. Se trata de una actitud inmoral que raya en una mezquindad tremenda y que afecta a todos los sectores".

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios