El Partido Popular e Izquierda Unida criticaron ayer la "discriminación" de la Junta de Andalucía hacia los ex eventuales de Delphi, que reclaman su equiparación a la antigua plantilla de la empresa y que mantienen un encierro desde el pasado lunes en el edifico de los sindicatos de Cádiz. Los dos partidos de la oposición volvieron a pedir ayer coberturas para estos ex trabajadores.

Para el PP es "intolerable que el colectivo de ex eventuales siga padeciendo la discriminación a la que la Junta lo ha sometido desde que cerró la factoría dándoles un trato desigual a pesar de que algunos de estos ex empleados llevaban trabajando para Delphi muchos años". "Estos encierros o la no llegada de las empresas anunciadas demuestran la incapacidad del Gobierno de Chaves de asumir sus responsabilidades y hacer frente a una situación de crisis industrial en la Bahía", declaró el presidente de los populares gaditanos, José Loaiza. Especialmente "vergonzoso", insistió, "es el hecho de que, tal y como denuncian los propios ex trabajadores, el viceconsejero de Empleo de la Junta de Andalucía, Agustín Barberá, mintiera al Defensor del Pueblo andaluz asegurando que no existían eventuales para justificar la diferencia de trato".

Por su parte IU ha exigido a la Junta la equiparación de las prestaciones sociales al menos con los trabajadores eventuales de las empresas auxiliares. A juicio del diputado Ignacio García, que visitó a los encerrados, "se ha recurrido a artimañas legalistas y burocráticas para no considerar trabajadores de Delphi a estos eventuales, cuando algunos de ellos llegó a estar hasta 14 años trabajando como eventual para Delphi y después de que se les restituyera el contrato días antes del cierre de la planta de Puerto Real".

Desde la Junta de Andalucía, el delegado provincial de Empleo, Juan Bouza, afirmó a preguntas de los periodistas que "ellos (ex eventuales) saben que hay un acuerdo firmado con los sindicatos y que la Junta no se va a saltar ningún protocolo firmado previamente".