Peña Flamenca A.C. El Chumi

Cuadro Flamenco de Ofelia Márquez al cante, Alba Bazán y Abraham García al toque, Manuel Lin y en la percusión, Naín Real. La presentación fue dirigida por Manolo Quirós, quien dio la bienvenida al nuevo año y envió saludos a Miguel Salado, deseándole una pronta recuperación después de su reciente operación quirúrgica. Expresó el deseo de verlo pronto en el escenario de la peña, pidiendo comprensión al público por su salud y presentando así al elenco artístico.

La guitarra y la caja acompañaron el iniciático toque de seguiriya de Manuel Lin, con un solo profundo y creativo de creación propia, seguido por la introducción de Alba en los cantes por Toná. Interpretaron una evocativa 'Cantes campesinos de Besana' por pajarona de Bujalance, estilo de cante denominado de Arahal por trilla, destacando la riqueza de los cantes camperos y su conexión con la tierra de Sanlúcar de Barrameda. Abraham se unió con su voz profunda por carcelera, mientras Alba y él entrelazaron sus estilos en seguiriyas de Tona, mostrando dos enfoques distintos: el cante bonito y preciosista de Alba y el cante expresionista de agarre de Abraham.

En la voz de Alba la guitarra por malagueña resonó, jugando con los registros y ejecutando el cante por Málaga abandolao, que culminó con una impresionante serrana. La fusión interpretativa continuó con Verdiales de los Cantes de Juan Breva y el Cojo de Málaga., llevándonos hacia el palo de Caña, donde el baile de Ofelia Marqués acompañó la musicalidad, rompiendo en un fascinante diálogo con los cantes de Alba y Abraham.

La segunda parte comenzó con el toque de caja de Naín Real, el maestro Lin y la voz a capela de Abraham, ofreciendo una memorable selección de soleares por bulería. Abraham demostró su versatilidad vocal, destacando su capacidad para explorar los matices del cante. La presentación de Ofelia, vestida con una bata negra evocativa de la tradición gitana, fusionó la danza elegante de escuela clásica con la fuerza del flamenco, intercambiando voces masculinas y femeninas en un baile lleno de gracia y precisión.

La energía y la conexión entre Alba y Abraham se intensificaron en las bulerías de Cádiz, creando un conjunto impresionante que dejó al público asombrado. La actuación culminó con un homenaje a la libertad, como lo expresó mi amigo francés, Rolan Marchenald como él sintió el flamenco. Alba concluyó con un repertorio de bulerías que transitó desde Sevilla hasta Utrera, terminando en Jerez.

Ofelia se despidió con gratitud, destacando su retorno después de la maternidad y agradeciendo a su grupo y a la peña como al público su agradecimiento.

Agradezco el trato especial recibido de Chaqui Robles, Pepe Rojas, su esposo y el resto de la junta de la peña, aficionados de siempre con los que da gusto conversar con el conocimiento de intercambio.

Así lo viví, así lo sentí y así espero transmitirlo.