Algunos pueblos de la Sierra de Cádiz pondrán fin a su carnaval este fin de semana. En Cádiz existe la tradición de hacer la quema del Dios Momo y la bruja Piti como ritual que marca el final de esta Fiesta de Interés Turístico Internacional. Sin embargo, en otras ciudades de España lo más habitual es celebrar el entierro de la Sardina. Ahora bien, ¿sabías que en un municipio de la Sierra de Cádiz se hace un ritual diferente?

En Ubrique el carnaval llega a su fin con el Entierro de la Patacabra este domingo 3 de marzo a las 18:00 horas. Este año será el entierro del Entierro de la Patacabra y es una idea que se le ocurrió a Leandro Cabello, el organizador de este evento carnavalesco que cumple 32 años. La idea de este año surgió mientras paseaba por el pantano y vio el Dolmen del Juncal, una curiosidad funeraria que también se ha referenciado con otras para crear el catálogo de costumbres funerarias de Ubrique.

Cada año la temática de la patacabra es una sorpresa. Lo que sí se sabe es que tendrá su salida en torno a las 18:00 horas desde la plaza de la Verdura y realizará su recorrido habitual hasta desembocar en la plaza de las Palmeras para ser quemada. Este emblemático y tradicional festejo que pone fin al Carnaval de Ubrique es de gran simbología para este pueblo de la Sierra de Cádiz ya que la patacabra es todo un símbolo del sector marroquinero. A continuación podrás ver cómo fue el desfile de años anteriores.

Patacabras jubiladas

Además de disfrutar del carnaval, si sientes curiosidad y quieres saber más sobre esta curiosa herramienta deberás saber que en el Convento de Capuchinos de Ubrique se encuentra la exposición permanente Manos y Magia en la Piel. Aquí podrás ver 253 patacabras jubiladas que pertenecieron a aquellos artesanos de la piel que dedicaron su vida a la marroquinería. Una patacabra es una herramienta imprescindible y característica del trabajo de la piel en Ubrique, tallada en madera y con características únicas que se adaptan a cada mano del petaquero.

Las patacabras suelen acompañar toda la vida a los artesanos de la piel y, por esta razón, en el Museo de la Piel se le ha dedicado un espacio a aquellas patacabras ya jubiladas que han sido donadas por aquellos trabajadores de Ubrique que durante años se han dedicado a este sector tan importante del pueblo.

Patacabras jubiladas en el Museo de la Piel