Cádiz

Siete dimisiones (y otras dos a medias) en la Corporación Municipal de Cádiz en 31 meses de mandato

  • Antes de los concejales socialistas se marcharon Fran González, Teresa Almagro, Ignacio Romaní y David Navarro

  • Villero también dimitió, en su caso sin renunciar al acta de concejal

Los concejales del PSOE Mara Rodríguez, Francisco Javier Ramírez y Rosa de la Flor, bajando la escalinata del Ayuntamiento.

Los concejales del PSOE Mara Rodríguez, Francisco Javier Ramírez y Rosa de la Flor, bajando la escalinata del Ayuntamiento. / Lourdes de Vicente

La que inició su camino tras las elecciones de mayo de 2019 va camino de ser una de las Corporaciones más accidentadas de la historia democrática del Ayuntamiento. La foto que registraron las urnas aquella noche electoral cada vez concuerda menos con la que los plenos municipales dejan mes a mes. Y es que desde el primer momento se vienen sucediendo pequeños movimientos de banquillo, bailes de concejales que ya se iniciaron en el anterior mandato y cuyo último capítulo -por ahora- lo han protagonizado los socialistas Mara Rodríguez, Francisco Javier Ramírez y Rosa de la Flor.

Antes de que ellos renunciaran a su acta de concejal, se marcharon del Salón de Plenos otros cuatro concejales. El primero fue Fran González, que ni siquiera llegó a iniciar el mandato anunciando su retirada antes del Pleno de Investidura por su pésimo resultado electoral; este movimiento provocó que Mara Rodríguez se hiciera con la portavocía del grupo, al que accedía Rosa de la Flor. Curiosamente, una concejala que entró como suplente y que vuelve a marcharse, esta vez por voluntad propia.

Nada más comenzar el mandato se marcharía el popular Ignacio Romaní para ocupar el puesto que actualmente mantiene como responsable de la agencia pública andaluza de vivienda en la provincia, incorporándose a la Corporación el número 7 en la lista popular, José Carlos Teruel.

Luego le tocaría el turno al equipo de gobierno, que ha sufrido dos bajas en estos casi dos años y medio de mandato. Primero se iría, al poco de iniciarse la andadura, Teresa Almagro, quien dejaría su sitio a Paco Cano, que venía ejerciendo funciones de asesor hasta ese momento; y en verano de 2020 se despediría de la política David Navarro, sustituido por Rocío Sáez.

A todos ellos hay que sumar el nombre de Domingo Villero, otro concejal dimitido aunque en su caso optó por no renunciar al acta, pasando de ser el portavoz de Ciudadanos a quedarse como concejal no adscrito, con las limitaciones en sus funciones que eso conlleva y que siempre suele poner sobre la mesa Villero, quien parece adaptado al rol que le ha tocado asumir.

Y también hay que mencionar en este accidentado recorrido por la Corporación Municipal elegida en mayo de 2019 a Isabel Fernández Casaña, la número 15 de la lista de Adelante Cádiz en aquellas elecciones que, sin embargo, renunciaría ser la concejala sustituta de David Navarro, lo que propició la entrada de Sáez.

Siete dimisiones, por tanto, y otras dos a medias en un accidentado camino que aún tiene otros 16 meses por delante.

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