Sobre el ciprés que pide talar Suso en Cádiz: "Su mantenimiento ha sido correcto y acordado con él"

Cádiz/Los vecinos de Cádiz demandados por el futbolista gaditano del Sevilla CF Suso, a quienes exige la tala de un ciprés con entre 30 y 50 años de edad por las molestias que le causa en la piscina de su nuevo chalé y por razones legales y de seguridad, aseguran que el mantenimiento del árbol ha sido en todo momento correcto, costeado por su comunidad de propietarios y acordado con el deportista.

En la demanda presentada por el futbolista contra los vecinos de Avenida Bahía Blanca, 9 se aporta un informe técnico que recomienda eliminar este ejemplar de Ciprés de Monterrey (Cupressus macrocarpa) "lo más rápido posible, antes que contribuya a ocasionar daños personales o materiales de mayor índole”. Esto se justifica "debido al riego de caída de ramas y las incomodidades que está ocasionando el ciprés en la parcela colindante, junto a la inclinación y descompensación de la copa del árbol".

En este documento se plantea que "a lo largo de los años el ciprés ha sufrido sucesivas podas como consecuencia de la proximidad al muro, que no solo lo ha debilitado sino que ha contribuido a que se incline y se descompense ligeramente la copa". Y que "esta poda recurrente, ha elevado la copa por encima de los dos tercios de la altura media total", haciendo que el árbol "se comporte de manera diferente frente a la dinámica del viento, pues ésta juega un papel muy importante en la absorción de energía y, por lo tanto, la reacción y movimiento del árbol frene al viento".

Ante esta recomendación, desde la comunidad de propietarios demandada aseguran que el ciprés goza de buena salud, que su mantenimiento ha sido siempre correcto, que "única y exclusivamente se le quitaron las ramas que le molestaban porque rozaban con el muro" del chalé del deportista, que el coste de esas labores corrió a cargo de los vecinos y que se realizaron en 2020 cuando Suso les permitió introducir una grúa en su propiedad para retirar el tronco de un ciprés seco que hubo que talar.

En la demanda interpuesta por el futbolista contra la comunidad de vecinos también se argumenta que "el árbol incumple la normativa en cuanto a la distancia de los árboles a linderos entre fincas, avalando el Código Civil la pretensión de talado que se solicita en la demanda, máxime cuando la distancia mínima de árboles como el presente ha de ser de 2 metros, y el que nos ocupa está a menos de 50 centímetros del lindero".

Respecto a este último punto, los vecinos recuerdan que "el ciprés lleva ahí hace 50 años, que no es que se haya plantado recientemente", y que nunca tuvieron problemas con los anteriores propietarios de la finca colindante y del chalé que allí existía antes de que se derribase para construir uno nuevo.

Pero sobre todo los demandados llaman la atención sobre "lo injustificado o cuanto menos desproporcionado que sería talar un ser vivo sano con medio siglo de vida porque cuando hay viento le caen hojitas y ramitas al vecino en su piscina o se le avería el motor de la depuradora", tal y como apuntó a este periódico José Carlos Correas, administrador de la finca y representante de la comunidad de propietarios. Insisten en que el árbol "goza de buena salud y en que no hay riesgo de caída de ramas y mucho menos de que el viento tumbe el ejemplar, porque si fuese así, lo habríamos retirado rápidamente como hicimos con los otros dos cipreses", dijo Correas.

La comunidad de propietarios de la Avenida Bahía Blanca, 9, va a encargar un informe técnico sobre el estado de salud de este ejemplar medio centenario de Ciprés de Monterrey, en respuesta al aportado por el abogado del futbolista en su demanda, "que demuestre que está sano y que no hay riesgo ninguno ni para los edificios ni para las personas de un lado y otro del muro que separa a las dos fincas colindantes".