"La única llave que queremos recuperar de forma inminente es la de la Casa del Obispo donde, además, nos han alertado desde el propio Obispado que hay movimientos estos días". Con estas palabras responde el concejal de Patrimonio del Ayuntamiento de Cádiz, Paco Cano, al gerente de la Casa del Obispo, Germán Garbarino, en relación a las declaraciones realizadas a este diario tras las denuncias vertidas estos días por el mal estado de Entre Catedrales.

Actualmente "estamos pendientes de que el juzgado le haga el requerimiento de entrega de las llaves tras el procedimiento que iniciamos el día 13 de enero". "Pediremos unas medidas cautelarísimas para hacer una inspección y examinar la situación de aquello", añade.

El concejal de Patrimonio confirma que están en contacto con el Obispado de Cádiz, desde donde les han alertado de que "en estos días hay movimiento en la Casa del Obispo, y por eso queremos acelerar todo este proceso y acceder y ver si hay deterioro o expolio".

Por este motivo insiste en que desde hace meses están actuando desde Secretaría, Urbanismo, con Policía Local y la Asesoría Jurídica "y nada podemos hacer sin este procedimiento judicial". Si esto ocurre, "entraremos con notario, arqueólogo  y técnicos y revisaremos la situación también con el Obispado -que  hizo la concesión por 25 años a Monumentos Alavista- y con quien hemos tenido varias reuniones.

Hace dos días el PSOE, a través del edil Javier Ramírez, responsabilizaba de la situación de la Casa del Obispo al Ayuntamiento de Cádiz, a quien acusaba de inacción al estar en posesión de la llave. Y aunque el Consistorio aún no ha podido acceder al yacimiento, sí que se ha prolongado demasiado en el tiempo el proceso de recuperación, pues seis años son demasiados.  

El lío no sería tanto si desde el principio no se hubiera mezclado la realidad del mirador Entre Catedrales y de toda la explanada anexa a la Casa del Obispo que cubre y que es municipal, con la del propio yacimiento arqueológico, explotación adjudicada a Monumentos Alavista. Lo que sí que une a ambos espacios es el mal estado que presentan normalmente, el primero por convertirse en objetivo reincidente de actos vandálicos sin ser reparados en la parte superior de la plaza, y el segundo, por el cierre como consecuencia de filtraciones y humedades, según el propio gerente, Germán Garbarino. 

Por este motivo Paco Cano quiere aclarar la situación y confirmar que la única llave que quieren es la de la Casa del Obispo, "y no de Entre Catedrales como ha dicho Germán Garbarino, que estará respondiendo a Javier Ramírez, pues son dos espacios distintos y debería saber que Entre Catedrales es responsabilidad municipal". 

El concejal de Patrimonio se lamenta de que el socialista Ramírez "haga partido en lugar de ciudad, pues siempre he estado dispuesto a hablar y dialogar, a tomar ideas, a ver qué soluciones damos a todo lo vinculado con el patrimonio en la ciudad, pues es cierto que el presupuesto es menos del que quisiera (55.000 euros) y tenemos que buscar subvenciones, buscar programas, ver dónde presionar y conseguir inversión para intervenir en parte importante de nuestro patrimonio como el Castillo de San Sebastián o las murallas".  

Cano incidía en que "ya se han realizado varias actuaciones  en Entre Catedrales y se han tapiado accesos hasta en cinco ocasiones, además de realizar labores de limpieza y de retirada de enseres, pero rompen los cristales y vuelven a entrar". 

Con todo, una vez finalice todo el proceso judicial y dispongan de las llaves se realizará una intervención integral en el recinto y se iniciará el proceso de licitación para explotar ambos espacios de forma conjunta. Para ello se va a licitar en breve el cierre definitivo de todos los accesos con una inversión de 70.000 euros, "procedente de Urbanismo".