El gobierno de coalición entre Podemos y Ganemos, que gestiona Cádiz desde hace algo más de un año, tenía puesta buena parte de sus esperanzas inversoras en los fondos europeos que ahora se les ha denegado.

Eran 15 millones de euros, que se debían complementar con varios millones puestos por el propio municipio, esenciales para el desarrollo de una parte fundamental de su política social. Al fin y al cabo, una buena parte de este dinero iba destinado a barrios especialmente degradados ubicados en Puerta de Tierra. Y, además, planteaba la puesta en valor de los Depósitos de Tabacos, como referente de la economía social y las nuevas tecnologías.

Ahora al gobierno de José María González se le ha desinflado el salvavidas. Tendrá que buscar dinero donde no hay para afrontar proyectos de gran valor ciudadano. Y tendrá que evitar que los Depósitos de Tabacos se conviertan en un nuevo edificio muerto en la ciudad, de los que tanto abundan, aunque ello le va a suponer un elevado coste.

Tendrá que explica el gobierno central, del PP, porque se le ha denegado a Cádiz esta ayuda, y a otras poblaciones de la provincia, como Chiclana, Rota, San Roque o Los Barrios. El caso de la capital es aún más sangrante pues desde que se pusieron en marcha las ayudas europeas, como los planes Urban y Urbana, el Ayuntamiento ha demostrado su capacidad de gestión, elogiada en varias ocasiones por Europa.