Memorias del ayer: Martes Santo de 1937 en Cádiz

Esta Archicofradía es una de las más antiguas que esta ciudad posee, pues por datos que existen en los archivos, se comprueba que tuvieron sus miembros la primera reunión el día 7 de Abril del 1660, habiéndose fundado y continuado en la actualidad canónicamente establecida en la Parroquia se San Antonio.

Existen multitud de documentos que acreditan la importancia que siempre tuvo la Cofradía y el gran amor que el pueblo de Cádiz profesaba siempre a sus Titulares; una prueba de ello es que en un acta existente y firmada por un padre prior de los Franciscanos de esta ciudad, se dice que el Martes Santo del año 1735, habiendo salido procesionalmente las imágenes de esta Cofradía, empezó a llover torrencialmente y como coincidiese que pasaban por delante del Convento de San Francisco, acordaron introducir las imágenes y sus atributos en la Iglesia del mismo, en donde “lleno materialmente de público y con un fervor grandísimo “los franciscanos celebraron con gran solemnidad la hospitalidad que daban a los Titulares de la Cofradía, entonando un Miserere y un Stabat Mater con el padre prior revestido de capa pluvial; y como la lluvia continuase, la Junta de Gobierno de la Cofradía y con la venia del Ilustrísimo señor Obispo de la Diócesis, acordaron que quedasen las imágenes hasta el Jueves Santo si el tiempo lo permitía.

En vista de ello (y como muestra de lo que anteriormente decimos con respeto al amor que hacia el Cristo de la Columna existen), el público llenó el templo durante 48 horas con un gran fervor, rezando durante el día y la madrugada.

La imagen del Cristo de la Columna se conoce en Cádiz con el sobrenombre de El Aguador, basándose en que sus mayores milagros han consistido siempre en hacer llover cuando en rogativa el pueblo devotamente se lo pedía, habiéndose sacado con dicho objeto varias veces y habiendo correspondido siempre Dios Nuestro Señor, en su imagen del Cristo de la Columna, a la petición que una ciudad fervorosa le hacía.

Han constituido la Junta de Gobierno de esta Cofradía personas muy conocidas de la buena sociedad gaditana, figurando en los archivos nombres como el de don Agustín Clotet, que era secretario en el año 1875. Esta Hermandad salía a la calle en tiempo con unos doce pasos pequeños en que iban depositados los atributos de la Pasión, tales como martillo, tenazas, escaleras, etc., todo de plata, siendo del mismo metal la magnífica columna que se encuentra situada al lado izquierdo del Titular.

Como objeto de valor, citaremos también, el valioso obsequio de don Ignacio de Cajigas, consistente en un paso con varales de plata, de la Virgen de las Lágrimas, que tanto llama la atención y que puede considerase como el mejor que existe en esta ciudad.

La túnica de esta Cofradía que era blanca y morada, fue sustituida por una negra de estameña, con cinturón ancho de esparto y sandalias.