El Pleno ha dado este viernes luz verde al convenio de planeamiento entre el Ayuntamiento de San Fernando y el Obispado de Cádiz y de Ceuta que permitirá afrontar el desarrollo de los suelos del antiguo convento de las Capuchinas –en pleno centro de la ciudad– donde se prevé la construcción de una residencia de mayores y de viviendas de alquiler, renta libre y protegida.

Además del apoyo del gobierno socialista, la propuesta han contado con el voto a favor del grupo municipal Vox. Por su parte, tanto PP como AxSí se han abstenido e, incluso, han mostrado sus "dudas" ante la falta de información con la que –afirmaron– el ejecutivo había conducido estos trámites.

Tanto como para que los populares tuvieran que recurrir al Consejo de Transparencia y Protección de Datos de Andalucía para que se les facilitara la información que demandaban al respecto, como ha advertido durante la sesión la edil Carmen Roa "Se merecen que le voten que no por el oscurantismo y la falta de transparencia con la que traen las cosas", ha llegado a decir al gobierno local. 

El portavoz de AxSí, Fran Romero, ha ido más allá para hablar de "pelotazo" con los suelos de las Capuchinas al citar textualmente la memoria justificativa –que no estaba inicialmente en el expediente– para señalar que "la modificación encuentra su justificación urbanística en la necesidad de dar más valor a las parcelas del convenio".

"Alguien mal pensado podría apuntar que esto es una operación profundamente especulativa, incluso un pelotazo urbanístico, porque aquí se va a demoler gran parte del espacio", ha afirmado el edil andalucista, que ha expuesto a continuación sus dudas acerca de los porcentajes de vivienda de renta libre y protegida que se van a construir o cómo de accesibles serán los alquileres propuestos o, incluso, la residencia de mayores que se proyecta levantar, "un negocio privado", ha recordado. 

El desarrollo urbanístico de las Capuchinas 

En la propuesta de convenio se apunta a 4.782 metros cuadrados para la futura residencia, 2.010 para alojamiento dotacional, 1.536 para VPO y 7.004 para viviendas libres y locales, además de los 757 metros cuadrados de superficie de la capilla.

Desde el equipo de gobierno, el delegado de Desarrollo Urbano, José Luis Cordero, ha defendido los beneficios que la operación urbanística reportará a la ciudad al propiciar el desarrollo de unos suelos en pleno centro que actualmente –y desde que la orden de las clarisas capuchinas se marchara hace seis años– están completamente sin uso.

También ha señalado a la zona verde en pleno centro que se proyecta junto a la residencia y las viviendas y refirió la cesión anticipada de la capilla que se recoge en el convenio y que permitirá contar con este equipamiento de inmediato sin tener que esperar a los instrumentos de planeamiento que precisa el desarrollo urbanístico y que se pretende que sea la futura sede del Consejo de Hermandades y Cofradías.

El Ayuntamiento –ha dicho el responsable del área de Urbanismo– obtiene la cesión de la capilla y "solo se compromete a iniciar los trámites de los instrumentos de modificación de la ordenación".

También, en la réplica a la intervención de los concejales de la oposición, Cordero ha defendido la intervención del Ayuntamiento en "un acuerdo que el Obispado podría haber cerrado por su cuenta con la promotora" y que había permitido esa cesión anticipada de la capilla que pasará a ser equipamiento cultural.

Por parte de Vox, el edil Ángel Aparicio ha mostrado su acuerdo con el convenio propuesto pero ha pedido encarecidamente que se respete el punto en el que se obliga al Ayuntamiento a mantener para la capilla un uso que no sea contrario a la fe católica: "Hay que respetarlo, no nos vaya luego a dar la neura y a querer poner una mezquita", ha dicho.