En torno a 6.500 alumnos de Enseñanza Secundaria Obligatoria y de Bachillerato han regresado hoy a los institutos y han dado comienzo al nuevo curso completando la vuelta a clase que el pasado jueves iniciaron los alumnos de Primaria e Infantil. 

Este regreso de las clases tras seis meses de paréntesis llega marcado por los rebrotes del Covid-19 y por los protocolos para prevenir posibles contagios en los centros, que han llevado a algunos institutos a adoptar medidas como las clases semipresenciales (en días alternos) para algunos cursos de Secundaria y Bachillerato para reducir la ratio de clases y de centros.

Entradas y salidas escalonadas, diferentes accesos para los alumnos e itinerarios previamente establecidos para recorrer las instalaciones y entrar y salir de las clases son algunas de las medidas más habituales adoptadas por los centros, además del uso obligatorio de la mascarilla y de geles hidroalcohólicos para lavarse las manos.  

La vuelta al instituto, en prácticamente todos los centros, se ha llevado a cabo en una jornada de horario reducido y se ha limitado a la presentación de las líneas generales del curso y a la exposición al alumnado de las medidas anti-Covid que se han implantado en cada centro. Esta flexibilidad será la tónica dominante a lo largo de toda la semana, en la que los alumnos y las comunidades educativas se irán adaptando a la rutina de un curso completamente atípico y marcado por la nueva realidad del coronavirus. 

En San Fernando, concretamente, se han incorporado a las clases hoy 4.974 alumnos de ESO y 1.456 de Bachillerato.