El Corpus Chico de la hermandad de la Misericordia volvió a recorrer las calles del barrio de la Pastora en la tarde del sábado recuperando toda una tradición tras dos años de ausencia a causa de la pandemia. 

El cortejo procesionó coincidiendo con la octava de la solemnidad dedicada al Santísimo tras la función religiosa organizada por la hermandad y oficiada por el párroco del templo, Luis Palomino. 

El paso de la Custodia, arropado por representantes de otras hermandades y especialmente por las cofradías de la parroquia, recorrió las calles acompañado de la banda de música de San José Artesano y portado por la cuadrilla de cargadores de la Misericordia. 

Numeroso público arropó esta tradicional procesión que lleva a cabo la sacramental de la Pastora, a la que este año se ha pretendido además dar un impulso que se ha notado especialmente en la decoración de las calles del recorrido con numerosos altares y alfombras. A ello han contribuido especialmente los grupos jóvenes de la parroquia, que se han participado colectivamente de estos preparativos, así como los vecinos del barrio. 

En el cortejo procesionó también por primera vez la imagen del Niño Jesús Eucarístico portada en una hermosa parihuela cedida para la ocasión por el Arsenal de La Carraca.