Ona Carbonell da a luz a su segundo hijo en Barcelona
Embarazo
Ona Carbonell y Pablo Ibáñez han dado la bienvenida a su segundo hijo a través de una publicación en Instagram.
La deportista no fue a los últimos Juegos Olímpicos y cargó contra la organización.
Ona Carbonell inicia las vacaciones con la llegada de un nuevo integrante a su familia. A sus 32 años de edad, Carbonell ha traído al mundo a su segundo hijo, Teo. La deportista olímpica de natación sincronizada ha visto por primera vez a su retoño en el hospital Can Ruti de Badalona, acompañada de sus familiares más cercanos. Tras un parto sin ninguna complicación, Carbonell ha presentado a su segundo hijo en sociedad, asegurando que está muy feliz.
La nadadora ha explicado a través de su perfil de Instagram que "es un niño sano, precioso y se porta muy bien. Los papis estamos muy felices y muy, muy emocionados". Bajo un tierno "¡Bienvendios al mundo, Teo!", Ona Carbonell ha mostrado la manita de Teo, agarrando los dedos índice de Ona y el papá de la criatura, Pablo Ibáñez. Además, la deportista ha querido mandar un mensaje de agradecimiento a los médicos. "Gracias a mi ginecólogo de toda la vida y a su equipo por su gran profesionalidad y cariño", ha relatado.
"Kai está muy sorprendido y contento de conocer a su hermanito pequeño", ha explicado Ona en su post de Instagram. Kai, que en agosto cumplirá dos años, es el primer hijo de Ona y Pablo. Su nacimiento, que también fue sin problemas, animó a la pareja a ir a por la parejita, dando como resultado la gestación de Teo. Como es habitual en estos casos, las redes sociales se han inundado de mensajes de felicitación a Carbonell e Ibáñez, celebrando el nacimiento del neonato.
A causa del embarazo, Ona Carbonell no ha podido participar en el Mundial de Budapest. Pese a ello, Carbonell ha entrenado dos veces por semana, en un intento de mantenerse en forma. "El mejor equipo del mundo dentro y fuera del agua. Os quiero mucho", expresó la deportista al ver que el equipo ha logrado la medalla de bronce. Ahora, Ona ya piensa en volver a zambullirse en el agua. Eso sí, si algo tiene claro, y así lo demostró en su documental, es que "la conciliación no es fácil en general, pero en el deporte la igualdad de oportunidades entre los hombres y las mujeres con respecto a la maternidad y la paternidad es muy diferente".
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