El que empiece a leer esta azotea creyendo que el titular va con segundas, se equivoca. Independientemente de que uno esté más o menos lejos o cerca de sus bases ideológicas es justo reconocer la valía del gesto del alcalde de Cádiz con los trabajadores de Expertus. En los años que lleva en San Juan de Dios lleva ya donados unos 80.000 euros que han ido a parar a entidades sociales sin ánimo de lucro dedicadas a ayudar a los que más lo necesitan. La última demostración de su porte moral le ha supuesto la pérdida de la mitad de los ingresos de noviembre y diciembre a favor de los empleados de Expertus que andan ahora en horas bajas y a los que esta ayuda les llega como agua de mayo. Es un detalle que debería llegar acompañado de una llamada al orden por parte de la Justicia contra empresas a las que, como a Expertus, les gusta jugar con el pan de sus empleados. De momento, a 'Kichi' le deseo que la vida le devuelva este bonito detalle.