Neymar, Messi y Cristiano

TENIENDO en cuenta que jugadores como Matthias Sammer o Cannavaro tienen un Balón de Oro en la vitrina de su casa y que otros como Xavi Hernández, Raúl González o Iniesta nunca fueron reconocidos con tal galardón, hay que concederle al trofeo de la revista France Football la importancia que merece. No obstante, a día de hoy creo que el mejor futbolista del planeta es Neymar. Y eso que su fichaje me provocó ciertas dudas. Sin embargo, el gran sabio Johan Cruyff ya dijo hace dos años que el Barça haría bien vendiendo el argentino y apostando por el brasileño. Y lo que dice el holandés es dogma de fe. Porque ahora mismo el ex futbolista del Santos está un peldaño por encima del resto. No sólo ha hecho olvidar al 10 sino que ha formado una sociedad con Luis Suárez inquebrantable. El uruguayo perfectamente podría entrar en ese podio del Balón de Oro si no fuera por el poder de la marca Cristiano. Porque el portugués, último vencedor del premio, no está para muchos trotes. De hecho, Cristiano es un excelente rematador, un atleta descomunal, pero le falta fútbol para aportar como hacen Neymar o el propio Messi.

Lo del argentino es otro cantar. Posiblemente sea el vencedor final por el cómputo de todo el año, por sus actuaciones, por su regate a Boateng y su vaselina a Neuer, porque convierte en oro todo lo que toca, pero ya digo que tengo la sensación de que el reinado de Neymar está por llegar más pronto que tarde.

Un apunte más. Mientras que el Barcelona fichaba a Neymar y Suárez, el Madrid se gastaba centenares de millones en jugadores como Bale, Kovacic, Danilo... La diferencia es que mientras que un club firma futbolistas el otro insiste en inflar el mercado al ritmo que le marca el todopoderoso Jorge Mendes. ¿Por qué el Madrid siempre llega tarde a los fichajes? Es un misterio. El año que viene irá a por Lewandowsky, cuando ahora el que se sale en Alemania es Aubameyang. Al tiempo.