Berga, ven a Mahoma

LA primera vez que oí la palabra "verga" (con v en castellano) pudo ser cuando Canal Sur ponía películas picantes de los '70, los sábados por la madrugada. Creo que fue en boca de un cura o clérigo, que ofrecía su miembro viril a una moza o incluso monja. La primera vez que pronuncié la palabra "verga" pudo ser comentando la escena con mi amigo Alfonso, compañero de andanzas de la adolescencia. Recuerdo que imitábamos al cura y su forma de enfatizar la dichosa palabra, que nos parecía muy rara y no encajaba con las palabras vulgares que ya habíamos aprendido para designar el pene. "Verga, mi verga, toma la verga y goza" o algo así repetíamos doblados de risa. No teníamos claro si era un arcaicismo religioso usado con ironía pseudo pornográfica o si era una palabrota más. Nuestros dominios del castellano y la sexualidad no alcanzaban. Espero que mis lectores consideren que he mejorado con el castellano. Imagínense, cuando llegué a Cataluña y oigo que hay una capital de comarca que se llama Berga. ¡¿Cómo podía un lugar llamarse precisamente... así?! No solo la ciudad, toda la comarca de la cual es capital se llama el Berguedà, que imaginaba como valle plantado de pueblos dedicados al cultivo del nabo. Tanto en Cataluña como en España hay numerosos topónimos que se prestan a malas interpretaciones, pero como esto es Cádiz.cat, me centro en la Berga de Barcelona y en Benamahoma en Cádiz. Una vez, al decir el nombre de nuestro pueblo de la Sierra, un catalán se descojonaba porque entendió "ven a Mahoma". Y de buen rollo le expliqué que Bena es el mismo comienzo de nombres árabes que ellos en Baleares adaptaron a la lengua cristiana como Bini y en Valencia Beni. A mí, la Berga de Barcelona me encanta. Y recomiendo a los gaditanos que la visiten y vivan las fiestas de la Patum, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Se come de miedo y el paisaje prepirenaico es espectacular. "Si la montaña no va a Mahoma, Mahoma irá a la montaña". Pues como Berga no viene a mí, allá que voy yo este fin de semana, a celebrar una boda en una masía del Berguedà. Berga, curioso nombre para el sitio de una boda entre dos... chicas. Felicidades a mis queridas Montse y Carol.