Es la mayor preocupación de todos los municipios en estos momentos, recuperar a la mayor brevedad posible la economía local. Para eso, se han constituidos grupos de trabajo llamados de reconstrucción, grupos de expertos, grupos donde la diversidad ha sido lo común, con un consenso de políticos, comerciantes, empresarios, hosteleros, que se han dado la mano para unir sus fuerzas con la única intención de revitalizar sus economías, que en definitiva es la economía de la ciudad.

No va a ser fácil. Existe un miedo justificado en volver a eso que se ha dado en llamar la normalidad. Los rebrotes no ayudan a perder ese miedo. Pero hay que ir entrando poco a poco en recuperar la libertad de movimientos, con muchísima precaución, y en eso tienen que poner todo sus medios los propios comerciantes y hosteleros. Si ellos dan confianza a sus clientes, estos, los clientes, cogerán confianza y volverán a recuperar su modo de vida anterior a esta (que todavía esta aquí) pandemia.

Por lo tanto hay que volver a sentir las satisfacciones de la vida anterior y hay que volver a vivir las mismas sensaciones que teníamos antes. Este es el mensaje que ha lanzado nuestro Ayuntamiento para que entre todos recuperemos la vida y la economía local. Una apuesta por lo local, junto a empresarios, hosteleros, comerciantes, mercados de abastos, todos juntos en busca de la recuperación económica y social. Una apuesta por la ciudad, que irá acompañada de una gran campaña publicitaria para captar clientes no solamente locales, también del resto de la bahía.

Hay que reconocer que durante todo el confinamiento el gobierno de la alcaldesa no ha dejado solos a los comerciantes. Han existidos ayudas económicas en la medida de las posibilidades de nuestra administración. Y ahora toca remar en la misma dirección para seguir ayudando a todos los sectores afectados. Pero como digo, los comerciantes son los mas interesados de que esta normalidad llegue lo mas pronto posible y por lo tanto deberán poner todos los medios a su alcance para dar un servicio de máxima calidad que atraiga al público, todavía algo reacio y temeroso, a sus establecimientos.

Cada uno debe poner su parte. Sabemos que es difícil, pero se va entrando en esa pretendida normalidad. Hay que recuperar la economía local, hay que recuperar la vida de la ciudad, hay que recuperar el centro de la ciudad y ha llegado el momento de que los ciudadanos seamos conscientes de que la ciudad nos necesita.

Y la forma de demostrarlo, de ser solidario con los nuestros, es quedarnos este verano en La Isla y así contribuir con la recuperación económica y social de la ciudad. Los comerciantes han trabajado en adecuar sus comercios, muchos (en especial los del mercado) han estado durante el confinamiento llevando sus productos al domicilio, el ayuntamiento ha puesto en marcha todo un plan de ayudas y dinamización para sacar a los isleños a la calle y ahora tenemos que preguntarnos, ¿qué podemos hacer los isleños por nuestra ciudad?