El Juzgado de Primera Instancia número 2 de San Fernando ha dictado una sentencia por la que declara la nulidad de la cláusula contenida en el contrato de una tarjeta revolving (Visa Oro) que tenía un tipo de interés del 29,83%. En la resolución judicial, la magistrada estima la nulidad de la cláusula de interés remuneratorio del 29,83% por entenderla claramente usuraria y basa su decisión otras sentencias del Tribunal Supremo que establecen que todo lo que exceda del 20% en tarjetas de crédito se debe considerar como un interés notablemente superior al interés medio del mercado para este tipo de contratación y, por tanto, debe considerarse nulo.

Según explica el Bufete Ortiz, que ha llevado la dirección jurídica del caso, el cliente contrató la tarjeta en 1992 y la utilizó, junto con otras tarjetas de la misma entidad financiera, durante 27 años, tanto en disposiciones de cajero como en compras. La configuración de la tarjeta permitía diversas fórmulas de amortización: abonar de forma total todos los meses el consumo de dinero sin intereses, bien con un 10% del importe aplazado, bien con un 10% del importe pendiente o con un importe fijo mensual de entre 500 y 100 euros al mes.

El cliente utilizó durante la vida de la tarjeta (27 años) todos estos sistemas de forma alternativa y "en todos se le cobró un interés remuneratorio salvaje del 29,83% por parte del banco. Incluso se le cobraba cuando retiraba dinero directamente del cajero. La entidad enviaba mensajes al cliente para que sacase el dinero gratis y lo que le escondía es que, aunque no iba a tener comisión para sacarlo, sí que iba a soportar intereses", afirma el abogado José Luis Ortiz. 

Los efectos económicos derivados de esta sentencia son la declaración de nulidad del interés remuneratorio del 29,83% y su eliminación y cancelación del contrato, así como la devolución íntegra de todas y cada una de las mensualidades cobradas con un 29,83% de interés durante los 27 años que ha sido empleada esta tarjeta con sus correspondientes intereses legales.