Los camping de la provincia de Cádiz, referente en el sector, se están preparando para la reapertura, aunque la gran mayoría lo hará en el mes de junio, esperando que se acabe la limitación de movimientos entre provincias. El Gobierno permite reiniciar ya la actividad pero con una serie de restricciones que se unen a la poca clientela que llegaría al no haber viajes entre las distintas provincias españolas. 

Por eso, según apuntaron desde la Federación Andaluza de Camping, la mayoría de establecimientos esperará a una fecha cercana a la mitad de junio (desde el 9-11 previsiblemente algunos, otros sobre el 20 y solo unos pocos en toda Andalucía están ahora abiertos) para volver a abrir, mientras adaptan sus instalaciones y ponen en marcha la distintas medidas que van conociendo con las publicaciones en el BOE o el BOJA y que le están generando muchos "quebraderos de cabeza". 

También están trabajando ya en la atención a los clientes y aunque las cancelaciones ganan aún a las reservas, que las hay, esperan que las cifras se den la vuelta con el paso de las semanas y que los visitantes y clientes "confíen en nuestros establecimientos como lugares seguro y con mucho espacio al aire libre, lo que creo que es una ventaja en estas circunstancias". Aunque será una temporada "complicada"  tienen esperanza en recuperar parte de las pérdidas ocasionas tras echar el cierre por el coronavirus, dando al traste con buen pico de la temporada como es la Semana Santa. Además los que abren en invierno, también dejaron de recibir clientes internacionales, que aprovechan las fechas desde después de Navidad hasta Semana Santa para disfrutar de las buenas temperaturas gaditanas antes de que llegue la temporada estival.

Así lo explica Patricio Castro, vicepresidente de la Federación Andaluza de Camping y gerente del camping Pinar de San José en Barbate, que recuerda la importancia en la provincia de un sector que tiene en Cádiz el mayor número de plazas de Andalucía. La Federación española, que pide más apoyo del Gobierno al sector, ha elaborado un protocolo sanitario de actuación y prevención para que los campings puedan ir desarrollando estas medidas antes de la reapertura con el fin de garantizar unas condiciones seguras y saludables para los clientes y los trabajadores, ahora en su mayoría incluidos en ERTes. Este protocolo irá en función de las distintas singularidades de cada instalación, alojamiento o área del camping. "Nuestros establecimientos, al estar al aire libre, están perfectamente preparados para llevar a cabo estas medidas sanitarias", han apuntado.

En Cádiz ya están en ello aunque esperan medidas más específicas del Gobierno para las siguientes fases. "Los clientes nos hacen muchas preguntas que aún no podemos responder claramente sobre la piscina, sobre cómo se podrá ir a la playa, porque de momento se han publicado las normas de la fase 2 pero no las siguientes".

Por eso, considera que también su futuro dependerá mucho de cómo queda el entorno, la normativa de las playas, la gastronomía o el entorno de la provincia, que cada verano atrae a tantos visitantes unido a la calidad de los campings gaditanos.

Por ellos no faltarán detalles. Ya están trabajando en aforos, limpiezas de alojamientos, de zonas comunes, de mantener las distancias,... "Tenemos que ver también qué actividades de animación podemos hacer con niños, cuántos, a qué distancia,...", pone de ejemplo. 

En Conil, el Camping La Rosaleda ya ha anunciado en sus redes que abrirá el día 11, el Pinar San José el día 9 y en Medina el camping abrió el día 11 de mayo.