La Fiscalía Anticorrupción ha abierto una investigación para esclarecer qué ocurrió en la Feria de Rota de 2023 tras el cierre de una caseta que quedó precintada por la Policía Autonómica por vender bebidas alcohólicas a menores de edad. La caseta infractora, sin embargo, amaneció abierta al público 24 horas después.

A raíz de estos hechos, la Fiscalía ha presentado una denuncia contra el actual alcalde de Rota, el socialista Javier Ruiz Arana, por prevaricación al entender que se pudo tomar "una decisión arbitraria". Anticorrupción lo llamará a declarar en breve en calidad de investigado para determinar si el regidor de la Villa fue o no la persona que ordenó desprecintar la caseta durante la pasada edición de la feria.

Según ha podido confirmar este periódico, el primer edil roteño es, de momento, el único investigado en este caso. 

Este medio también ha contactado con Javier Ruiz Arana, quien ha manifestado que no ha recibido "ninguna citación para declarar en sede judicial". En cualquier caso, el alcalde de Rota ha dicho que está dispuesto a colaborar con la Justicia y que entiende que Fiscalía Anticorrupción abra una investigación si es procedente.

El socialista Javier Ruiz Arana es alcalde de Rota desde el año 2015 y en las últimas elecciones municipales obtuvo mayoría absoluta.

Una petición a Salud

Por su parte, Daniel Manrique, portavoz del grupo municipal socialista en Rota, ofreció este jueves una rueda de prensa para tratar de explicar lo ocurrido el sábado de Feria del año pasado. Manrique relató que agentes de la Policía Autonómica detectaron que una caseta vendía bebidas alcohólicas a menores, por lo que se procedió a su precinto provisional sobre la una de la madrugada.

El socialista recordó que en el recinto ferial de Rota hay una sede conjunta de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, lugar donde se personó el titular de la caseta clausurada, el cual no estuvo presente durante la actuación policial. El empresario quería saber qué había ocurrido para tener que interrumpir la actividad de su negocio.

Según Manrique, en ese momento estaba allí una técnico de Fiestas y ésta informó a la delegada de Fiestas sobre el precinto. Asimismo, el alcalde de Rota se encontraba por esa zona del recinto ferial paseando junto a su familia. Cuando el casetero vio al alcalde, le comentó su problema y el regidor le dijo que se informaría sobre lo ocurrido para buscar una solución.

Daniel Manrique afirmó que el alcalde y la delegada de Fiestas le explicaron al casetero que se habían vendido bebidas alcohólicas a menores en su establecimiento, a lo que éste contestó que no tenía constancia de ello pues no estaba presente en el momento del precinto, si bien se comprometió a vigilar muy bien que esto no volviese a suceder.

Tal y como explicó el también primer teniente del alcalde en Rota en rueda de prensa, en las conversaciones que mantuvo Javier Ruiz Arana con la Policía Autonómica se acordó que esa noche la caseta se mantendría precintada como medida de persuasión y sanción y que al día siguiente se solicitaría a la Delegación Territorial de Salud el despreciento de la misma para que el empresario pudiese seguir explotándola durante los dos días de Feria que quedaban, apercibiéndole de que lo sucedido con la venta de bebidas alcohólicas a menores no podía volver a repetirse e indicándole que, obviamente, se iba a tramitar el procedimiento sancionador con la multa correspondiente.

Al día siguiente, continuó su relato Manrique, el alcalde envió una solicitud a la delegada de Salud para que desprecintase la caseta como autoridad competente para ello, tal y como se había acordado la madrugada anterior, y ello bajo el convencimiento de que la Policía Autonómica iba a cursar la misma solicitud.

Esa misma mañana, aseveró el portavoz socialista, el jefe de la Policía Local llamó al mando al frente del dispositivo de seguridad para preguntar por posibles altercados durante la celebración de la Feria. El mando le comentó tanto el cierre de la caseta como la solicitud tramitada por Ruiz Arana ante la Delegación de Salud; sin embargo, el jefe entendió que la petición del primer edil estaba dirigida a la Policía Local para que desprecintase la caseta en cuestión, pues entendió que se estaban ejerciendo competencias municipales en base a la Ley 13/1999 de Espectáculos Públicos de Andalucía.

En cuanto a la investigación judicial, Manrique aclaró que la Fiscalía sólo ha pedido que se le remita la documentación sobre este asunto, en concreto, la solicitud que el alcalde hizo a la Delegación Territorial de Salud previo acuerdo con la Policía Autonómica.