"Los ayuntamientos y las diputaciones deben dejar de considerarse origen del problema para convertirse en pieza fundamental de la solución". Esta es una de las claves que dio ayer José Loaiza, presidente de la Diputación provincial, en su intervención en el Foro de Cádiz, iniciativa promovida por Cajasol, el Casino Gaditano y Diario de Cádiz. Bajo el título 'Municipalismo, una manera eficiente de servir al ciudadano', el también alcalde de San Fernando y presidente del PP provincial, abogó por una reforma y modernización de las instituciones "sin medidas traumáticas" y defendió que el verdadero debate sobre la supresión de administraciones tiene que centrarse en "cuál debe ser su labor en la actual coyuntura" de crisis económica y financiera.

De hecho, Loaiza criticó que el debate se haya ido por derroteros "partidistas" y que "significados representantes políticos" quisieran "cargar a los ayuntamientos con la responsabilidad de la crisis" o trataran la cuestión de las diputaciones "como un asunto de ideología echando mano de la trasnochada dicotomía izquierda-derecha". "No se trata de suprimir o no administraciones, de lo que se trata es de si han desempeñando su labor convenientemente hasta ahora y cuál debe ser la labor que deben desempeñar. De lo que en realidad se trata es de una cuestión de mal o buen gobierno", insistió Loaiza.

Por eso, el dirigente del PP desarrolló unas claves sobre el papel que deben jugar los gobiernos locales, a los que defendió como administraciones más cercanas a los ciudadanos, "su primer referente" y por donde tiene que haber pasado todo político. "Si dentro de cuatro años ustedes coinciden conmigo en que el nuevo municipalismo ha recuperado su vocación de servicio, estaré satisfecho con el trabajo realizado", dijo. Y es que para salir de esta situación, afirmó, "sabemos qué hay que hacer". "Sabemos qué hay que hacer para enderezar el rumbo sin que se recorten nuevos derechos sociales", aseguró, "y debemos sumar esfuerzos para que, desde un buen gobierno, encarrilar la recuperación". "Un buen gobierno pasa por la reforma de las instituciones, por su modernización, por la transparencia, por la austeridad y por la eficacia en la prestación de servicios", añadió. Para Loaiza, son las administraciones las primeras que deben dar ejemplo: "Son tiempos duros y hay que apretarse el cinturón y dar ejemplo, igual que miles de familias están realizando día a día sacrificios para poder acabar el mes y haciendo cuantos esfuerzos sean necesarios para ahorrar y optimizar los recursos. Y podemos hacerlo sin recortes sociales".

Entre las medidas para la modernización de las instituciones, Loaiza apostó en el Foro de Cádiz, primero, por delimitar las competencias de las administraciones, "para evitar despilfarros y para que no se descuiden los servicios". Luego propuso también un plan de apoyo a los ayuntamientos con medidas extraordinarias para salir de la crisis, ante la falta de apoyo de los gobiernos central y autonómicos hasta ahora. "Los ayuntamientos asumen servicios que no les corresponden, el 33% de las competencias que tienen las comunidades autónomas, sin que reciban ingresos por ello" , aseveró, y puso de ejemplo "los adelantos que la Diputación ha tenido que hacer para que la Ley de Dependencia" se aplique en varios municipios o que "sólo Diputación haya garantizado la liquidez en otros ayuntamientos" para pagar nóminas. Ese plan incluiría la revisión de la participación de las entidades locales en los tributos de su comunidad, medidas para aliviar la falta de liquidez, el abono urgente de las deudas pendientes de la Administración andaluza, la creación de un fondo de emergencia social o el aumento del Plan de Cooperación Municipal.

El presidente de la Diputación disertó además sobre la necesidad de que las administraciones locales presupuesten mejor. Dijo que ha llegado la hora de "extremar el control del gasto y la inversión". En la Diputación, y en el Ayuntamiento de San Fernando donde también gobierna, ha creado una oficina para tal fin y en la institución provincial han hecho unos presupuestos para 2012 "basados en la transparencia en las cuentas públicas, el realismo en las previsiones de gastos e ingresos y la austeridad". Eso sí, "con el principal objetivo incidir en la cooperación territorial y el empleo y garantizar las políticas sociales", insistió. Así, destacó el ahorro en gasto de personal, en gasto corriente y en la reorganización administrativa que supondrá un millón de euros menos de gasto y eliminando organismos autónomos que en ocasiones "salen del control".

Loaiza no se olvidó tampoco de las mancomunidades y habló de ellas también como útiles "si dejan de ser miniparlamentos" y se ocupan de "servicios como el tratamiento de los residuos sólidos urbanos o la gestión del agua". Aprovechó para criticar lo ocurrido en la Mancomunidad serrana -"no se pueden cambiar las reglas del juego", dijo- o su preocupación por la Federación de Municipios y Provincias (FAMP): "Se equivoca quien quiere contener el poder a toda costa".

El presidente provincial echó mano del "espíritu de 1812" y el "consenso de 1978" para "recuperar la confianza del ciudadano". "Ayuntamientos y diputaciones no pueden seguir siendo parte del problema. Seamos parte de la solución porque los ciudadanos tiene como primer referente a sus alcaldes y concejales y a sus diputados provinciales", concluyó.