Puerto Sherry ha iniciado su transformación más ambiciosa desde que la empresa Marina Puerto de Santa María recuperó la concesión administrativa.

El puerto deportivo ha emprendido el tránsito hacia un modelo más sostenible y moderno, actualizando sus objetivos a las agendas medioambientales más ambiciosas, introduciendo el reciclaje, el tratamiento y la depuración de aguas, la gestión de los residuos generados por su actividad, la introducción de iluminación led o la incorporación de nuevas tecnologías para facilitar la atención y el servicio al cliente y las gestiones de los navegantes, estén en tránsito o de manera fija en sus amarres.

La concesión de la Bandera Azul ha coincidido con un nuevo rumbo en la gestión del puerto, donde todavía queda mucho por hacer pero ya se han dado los primeros pasos.

Entre los objetivos se encuentra la mejora de la experiencia del cliente

El objetivo, según su director general, Nicolás Figueras, es conseguir que Puerto Sherry sea referente en el sur de Europa, por su marina, por la mejora de la experiencia del cliente y, por supuesto, en el plano deportivo, con el apoyo a la vela ligera, a los grandes regatistas que apadrina y la mejora de sus instalaciones, entre ellas el Club Náutico, que estaba en condiciones deficientes, y la playa asfáltica. En esta última, única en su género, se ha limitado el tránsito de vehículos no autorizados para facilitar la práctica deportiva y dejar más espacio para la entrada y salida de las embarcaciones.

Dentro de esta agenda, Puerto Sherry está apoyando también la vela adaptada, de manera que tras albergar en sus instalaciones el Mundial en 2019, se propone para el año 2024 que haya un Plan de Náutica específico para personas con movilidad reducida, en el que ya trabaja con La Caixa.

En las instalaciones portuarias dedicadas al mundo del crucero, tanto embarcaciones de menor eslora como grandes yates, se han introducido mejoras.

La vela ligera se concentra en la playa asfáltica del puerto deportivo.

En primer lugar, con el dragado completo de la bocana de entrada al puerto deportivo, situada junto al faro, y la transformación de los amarres de la dársena de grandes esloras, donde se ha instalado un nuevo sistema para recibir yates de hasta 70 metros, dejando una lámina de agua más diáfana y funcional. Esto ha ido acompañado del arreglo de los pantalanes existentes y de la creación de 36 nuevos puntos de amarre, mediante la reestructuración de los espacios de la dársena interior.

Otro de los objetivos de Puerto Sherry es poder atender por sí mismo, al modo de una factoría naval, cualquier problema que se presente en un barco o un velero, tanto a nivel de aparejos, motores, electricidad, velas, y por supuesto casco, orza y timón. Según los responsables del puerto deportivo, muchos de los yates que están siendo atacados por las orcas están acudiendo a reparar a las instalaciones de Puerto Sherry, donde se ha puesto a punto el travelift que permite subir los barcos a la zona de marina seca.

La bocana de entrada ha sido dragada en su totalidad.

Además, se ha ampliado el amperaje de la dársena exterior para dar cabida a los grandes yates, a la vez que en la iluminación general del puerto, dentro de ese principio de búsqueda de la sostenibilidad, se ha procedido a la instalación de iluminación led, una renovación que alcanza ya al 80% de los puntos de luz.

Puerto Sherry aspira además a transformarse en un destino turístico preferencial, ya que según confirma su director “el puerto quiere captar todo tipo de clientes”. Para lograrlo, es básica su oferta de alojamiento y gastronómica, en la que despuntan varios establecimientos de hostelería, así como dos hoteles y propuestas de ocio, exposiciones, cultura y comercio, con negocios innovadores y el establecimiento de parking gratuito para los clientes.

Se trata por lo tanto de mejorar la experiencia del usuario, con la voluntad de desestacionalizar el turismo para recibir visitas durante todo el año. Para ello, Puerto Sherry está haciendo un esfuerzo promocional, acudiendo a diferentes eventos turísticos, ferias y salones náuticos. En este punto, está incluso trabajando con Turismo Andaluz y varias marinas de la comunidad autónoma para la organización de una feria náutica en Andalucía.

La dársena interior, donde los clientes disfrutan de la náutica y del ocio.

Puerto Sherry está por lo tanto inmerso en un proceso de renovación para adaptarse a los nuevas exigencias ambientales europeas. En 2037 deberá renovar la concesión, y para entonces espera haber completado su adaptación a las nuevas tecnologías y haber digitalizado todas las gestiones.

Para ello, cuenta con un Plan Estratégico que establece la hoja de ruta para hacer del puerto deportivo el referente de marinas innovadoras y sostenibles del sur de Europa, lo que permitirá su internacionalización, en sintonía con unos clientes cada vez más exigentes que reclaman nuevos valores para estos nuevos tiempos de cambio.