Del tanguillo al yo tengo un moco

Las nuevas formas en el Ayuntamiento de Cádiz han alcanzado hasta las pruebas de selección de ninfas para el próximo Carnaval. Ahora en las entrevistas no se pide que se bailen tanguillos, que eso es mu rancio, ahora se pide a las candidatas que canten esa canción tan bonita y tan gaditana que dice Yo tengo un moco, lo saco poco a poco... y cada vez más rápido, hasta que las chicas ya no saben si se están presentando a ninfas o a un concurso de frikis. Eso sí, sin mostrar sus rostros a la prensa, no vaya a ser que se denigre su condición de mujer, porque no son mujeres objetos oiga, qué se han creído. Así que, para evaluar su inteligencia, su capacidad oral y sus cualidades artísticas, el concejal Adrián Martínez de Pinillos comandó el miércoles una especie de convivencia cristiana, pero, en vez de hacerlo en los Salesianos donde estudió, la trasladó al Salón de Plenos. Allí, una vez reunidas las posibles ninfas, Adrián les pidió que se pusieran en círculo para hacer una dinámica de grupo. "Nos quedamos un poco flipadas, pero bueno, le seguimos el rollo", comentaba al salir del examen una alucinada candidata. "Empezó él, dijo que se llamaba Adrián y se tocó la oreja; luego siguió otra compañera, que decía su nombre y hacía otro gesto, así hasta las últimas, que era un lío, porque te tenías que acordar de 14 nombres y 14 gestos", recordaba.

Así se rompió el hielo de cara a la siguiente y exigente prueba. "Nos hicieron quitarnos los zapatos a todas para jugar al juego de La Jarra. Adrián y otra concejal se pusieron con las manos en jarras y las piernas abiertas en el centro del Salón de Plenos y todas nosotras, en fila, teníamos que salir corriendo y meter la cabeza en algún hueco, debajo de las piernas, en el brazo izquierdo, el brazo derecho, donde podíamos. Yo fui eliminada del tirón, menos mal", decía.

Y luego llegó el momento cumbre. "Nos han puesto a cantar Yo tengo un moco, a las 14 a la vez, lo redondeo y lo miro con deseo, cada vez más rápido. Ha sido increíble".

Para finalizar llegaron las preguntas, en general, sobre el Carnaval, si veían bien la figura de las ninfas y el papel que piensan que debe tener. En años anteriores a las aspirantes se les preguntaba quién fue el creador de la comparsa, las diferencias entre las modalidades que concursan en el Falla, qué cambiaría del Carnaval y temas de cultura general relacionados con la ciudad... Igual estas mismas preguntas habría que habérselas hecho al concejal de Fiestas antes de que tomara posesión de su cargo. Tampoco estaría mal saber la opinión de la concejala del Área de la Mujer, Ana Camelo, al respecto de estas pruebas y su nuevo estilo.

Tras la sorpresa inicial de las 14 primeras aspirantes, ayer tuvieron lugar más pruebas, aunque estas ya llegaron al Salón de Plenos sabiendo a qué se iban a enfrentar. Puede que alguna decidiera que para su integridad moral resulta más ofensivo que las pongan a corretear descalzas por el Salón de Plenos al hecho de ver su cara en un periódico y a última hora se diera media vuelta. Eso sí, igual este año las elegidas, en vez de entonar los tanguillos de Cádiz, podrían cantar en su palco Yo tengo un moco... Así se rompe con el pasado, con todo lo que huele a la casta, hasta con los Duros Antiguos.