Pablo Molina vuelve al fútbol gaditano después de dos temporadas en Extremadura. El lateral izquierdo ex cadista se ha comprometido con el Arcos, para lo que ha tenido mucho que ver la presencia de Pepe Bermúdez en el banquillo del conjunto serrano.

Pablo Molina (23 años) salió del Cádiz B hace dos temporadas y este periodo lo pasó en el Cacereño (2016-17), con el que se proclamó campeón del grupo extremeño de Tercera y a punto estuvo de subir, y con el Villanovense (2017-18), en cuyo conjunto este último curso rozó la disputa del play-off a Segunda A.

Al bravo lateral le han llegado varias ofertas de la categoría de bronce, pero la presencia de Bermúdez como técnico del conjunto arcense ha resultado determinante para que al final haya aceptado vestir la camiseta blanca aunque para ello baje una categoría.

Con Pablo Molina, el Arcos gana un futbolista de garra, comprometido y muy profesional. Un fichaje sonado para el proyecto de la escuadra serrana que ha rechazado ofertas de superior categoría para ayudar a hacer un Arcos grande.

Por otra parte, Maqui renueva una campaña más con los arcenses. El atacante, de 26 años, cumplirá cinco campañas en el equipo.