Desde que se decretaron el estado de alarma y el confinamiento obligatorio, la primera plantilla del Chiclana CF depende de las redes sociales para trabajar y comunicarse, como el resto de equipos de la categoría y con la dificultad que ello supone. Lupi, su entrenador, explica que a través de whatsapp envía las tareas del preparador físico y los chicos se animan después. "El plan de trabajo es general, a través de videos y con sesiones planificadas que luego los propios jugadores suben para mantener el contacto y la rutina", cuenta el técnico blanco.

El míster chiclanero considera que es muy importante seguir ejercitándose, "más por la parcela psicológica que por la propia forma física. La mayoría ha tenido que dejar de ir a trabajar o estudiar y esta es una buena manera de no estar todo el día sin hacer nada, que por lo menos continúen con sus entrenamientos diarios en la medida de lo posible". Todo ello sin olvidar que en el fútbol amateur no disponen de los medios ni el espacio que tienen los jugadores profesionales en sus propias casas (la mayoría, con gimnasio propio).

Pero el Chiclana siempre ha sido algo más y no podían quedarse cruzados de brazos. Desde que se inició el aislamiento, el club ha contribuido a la campaña de responsabilidad social Quédate en casa a través de iniciativas en sus redes sociales. Argudo, Mochilo, Pitu, el presidente -Juanlu Rojo- y el propio Lupi compartieron sus videos explicando el mensaje y recientemente se ha realizado una encuesta para confeccionar el once ideal de todos los tiempos, con la participación de los aficionados. En los últimos días, otros miembros de la plantilla como Diego Ramírez, Christian, Sergio y Vicente han hecho sus recomendaciones culturales en el Facebook del club para que estos días sean más llevaderos.

En cualquier caso, el fútbol prácticamente ha pasado a un segundo plano. Sobre la situación de la liga, los jugadores están divididos: unos creen que la competición debería terminar aquí y otros que tendrían que disputarse las nueve jornadas que quedan. Lupi considera que, pase lo que pase, va a ser muy difícil de determinar, "porque dejar la clasificación tal como está sería tan injusto como intentar disputar las nueve jornadas que quedan a toda costa. El caso es que nadie va a quedar contento con lo que se decida y a mí, desde luego, no me gustaría estar en la piel de a quien le toque inclinarse por una u otra cosa".

Tras una pausa, el técnico sentencia con lo que hemos tratado de eludir durante la conversación, pero que inevitablemente es lo que manda en el pensamiento de todo el mundo estos días: "Lo importante ahora es que esto acabe, que ya ha causado mucho daño. No sé dónde lo oí, pero queremos que este partido termine ya, que el árbitro pite el final".